Polémica. El debate sobre la existencia de Dios se sube a la publicidad de los autobuses
De estar en la sombra, ateos y evangélicos han pasado en las últimas semanas a la primera línea del debate religioso gracias a una guerra sobre la existencia de Dios que ambos bandos han plasmado en la publicidad de autobuses de Madrid y Barcelona.
De un lado, los ateos, que han trasladado a las calles de Barcelona una campaña que empezó en Londres contra la existencia de un ser superior. La idea partió de la escritora y humorista Ariane Sherine, de 28 años, que lanzó su propuesta en el rotativo The Guardian. Lo que comenzó de manera modesta, al final se extendió por todo el país.
El prestigioso científico, escritor y profesor de la Universidad de Oxford, Richard Dawkins, uno de los secularistas más radicales, entregó una generosa donación. Después, se creó una web para recaudar dinero y con los ingresos se plasmó en algunos autobuses el lema Probablemente no hay Dios. Deja de preocuparte y disfruta de la vida.
La polémica también se ha trasladado a Italia, pero los autobuses ateos previstos en Génova finalmente no se verán. La empresa que gestiona la publicidad del transporte público, IGP Decauz, se ha echado atrás. La Unión de Ateos y Agnósticos Racionalistas (Uaar), ideóloga de la campaña italiana, criticó que en el país no haya espacio para declararse ateo. Los abogados de Uaar estudian llevar el caso a los tribunales, informa Jordi Mumbrú.
"Yo también quiero"
Al ver la difusión de la campaña ateísta, un pastor evangelista de Fuenlabrada (Madrid) puso el grito en el cielo y dijo que él también quería. Lo mismo, pero anunciando que Dios sí que existe. Se puso a recaudar dinero y pagó por que dos líneas de autobuses de Madrid anunciaran lo siguiente: "Dios sí existe. Disfruta de la vida en Cristo".
La campaña evangélica durará hasta el 30 de marzo. A su vez, la Unión de Ateos y Librepensadores y Ateos de Cataluña pagó también para que el lema ya utilizado en Londres luciese en dos líneas de Barcelona, en catalán y castellano. Además, la pretensión de esta asociación es que la negación de Dios se extienda a otras ciudades como Madrid, donde ya tienen vía libre, Málaga o Bilbao.
Tanto la campaña atea como la evangélica han tenido gran repercusión mediática pero apenas vecinal. Los usuarios de las líneas afectadas han recibido la polémica con indiferencia. Ya algunos ni la conocían.
Pero ambos, evangélicos y ateos, han aprovechado el momento de gloria para dar a conocer sus ideas. De mano de sus cabecillas. De un lado, el pastor evangélico Paco Rubiales, defensor del "Dios sí existe", del otro, el librepensador y ateo Albert Riba, blandiendo su "Probablemente no hay Dios". Estas son sus historias.