El presidente Evo Morales dijo el viernes que pedirá paciencia con la oposición, sabiduría para gobernar y bienestar económico para el país en la misa central de la festividad de la Virgen de Urkupiña, este sábado en las puertas del Templo San Ildefonso del municipio de Quillacollo, Cochabamba.
“Yo diría personalmente paciencia para la oposición, sabiduría para atender las demandas (del pueblo) y que el crecimiento económico, pese a la rebaja de los precios de los recursos naturales, siga adelante”, declaró a los periodistas.
El Jefe de Estado también invocará la ayuda de la Virgen de Urkupiña para cometer menos errores o corregirlos en la toma de decisiones para el bienestar del pueblo boliviano. “Somos seres humanos, podemos equivocarnos y lo más importante es reconocer nuestros errores”, dijo.
Morales hizo esas declaraciones minutos después de llegar al Palco Oficial de la entrada folklórica de la Festividad de la Virgen de Urkupiña, que comenzó el viernes en la mañana y marca el inicio de tres jornadas culturales, religiosas y costumbres andino amazónicas.
El mandatario fue invitado por la Alcaldía las organizaciones sociales de Quillacollo. “Vengo a acompañar al pueblo de Quillacollo a la Virgen de Urcupiña en esta fiesta patronal que anualmente se recuerda desde Quillacollo”, sostuvo.
El Jefe de Estado recordó que es la décima vez que participa en ese evento cultural y relievó que se trata de una verdadera fiesta de la integración nacional. “Es una fiesta de la integración porque tiene muchos hermanos del interior del país y también del exterior, de Argentina, en especial”, destacó.
En esa línea, Morales dio la bienvenida a todos los turistas que llegaron a Quillacollo para presenciar la Festividad de Urcupiña.”Tengan una feliz estadía y que compartan sanamente esta fiesta”, remarcó.
Entrada
La entrada folklórica de la Festividad de Urkupiña comenzó con la presencia de 71 fraternidades departamentales y nacionales lideradas por un grupo de la Comunidad Laboral Santo Domingo que interpreta una zampoñada.
“Esta fastuosa entrada ha comenzado bien organizada y le pedimos a la población que venga a Quillacollo para apreciar este bello espectáculo”, dijo el alcalde de Quillacollo, Eduardo Mérida, en el inicio del evento que tuvo la fortuna de contar con un clima soleado después de dos días de nubarrones e intenso frío.
Miles de feligreses asistieron ayer a Quillacollo para participar de la misa central de la festividad de la Virgen de Urkupiña.
La homilía estuvo presidida por el arzobispo de Cochabamba, Óscar Aparicio, quien manifestó que la Virgen María es un ejemplo de servicio y la estrella de la familia de Nazaret.
Aseguró que María es la mujer que está atenta a las necesidades de sus hijos y nos recuerda que la vida se la vive en familia, la cual ocupa un lugar privilegiado para Dios. “La familia es el lugar donde podemos renovar y mejorar nuestra convivencia y afirmar el gozo. Hoy la propuesta más clara de esta festividad es guardar el corazón como lo haría María, al realizar esta atención primordial a sus seres queridos como ella lo ha realizado”, enfatizó.
El acto también contó con la presencia del presidente Evo Morales, el vicepresidente Álvaro García Linera y su esposa, el alcalde de Tarija Rodrigo Paz y asambleístas de Santa Cruz, el gobernador Iván Canelas, el alcalde de Cercado José María Leyes, el alcalde de Sacaba Humberto Sánchez, asambleístas departamentales y concejales de diferentes municipios, que fueron recibidos por el burgomaestre de Quillacollo, Eduardo Mérida.
Morales manifestó que su presencia en la festividad de la Virgen de Urkupiña le sirvió para reflexionar y ratificar su compromiso de continuar con su esfuerzo y trabajo por el bien de los bolivianos. Además solicitó éxito para las políticas económicas que impulsa. “He pedido paciencia y más paciencia, esfuerzo, salud, no solamente para las autoridades, sino para toda Bolivia”, señaló.
(Fuente: Los Tiempos)
