El Defensor del Pueblo Europeo reclama que la Comisión Europea mantenga reuniones de trabajo con los grupos filosoficos y Humanistas.
El Defensor del Pueblo Europeo lo que reclama no es que haya reuniones entre organizaciones filosóficas y religiosass; sino que se clarifiquen los procedimientos de relación de las organizaciones filosóficas y otras no religiosas con la Comisión; para que haya también estas reuniones específicas.
Tratado de funcionamiento de la Unión. Artículo 17
1. La Unión respetará y no prejuzgará el estatuto reconocido en los Estados miembros, en virtud del Derecho interno, a las iglesias y las asociaciones o comunidades religiosas.
2. La Unión respetará asimismo el estatuto reconocido, en virtud del Derecho interno, a las
organizaciones filosóficas y no confesionales.
3. Reconociendo su identidad y su aportación específica, la Unión mantendrá un diálogo abierto, transparente y regular con dichas iglesias y organizaciones.
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Nikiforos Diamandourosmediateur Europeenmediateur Europeeneo/13/21 febrero 2013
El Ombudsman alienta a la Comisión a clarificar las directrices para el diálogo con las organizaciones religiosas y no religiosas y, si es necesario, a redactar líneas directrices concretas sobre las pautas que se han de seguir en este tema.
Esto viene tras una observación crítica dirigida a la Comisión por su negativa a organizar un seminario de diálogo con la Federación de Humanista Europea sobre las exenciones para las iglesias en las normas europeas en materia de empleo. La Comisión explica su negativa afirmando que la Unión debe respetar el estatuto de las iglesias y organizaciones religiosas en los Estados Miembros.
El Mediador no ve como el compromiso de participar en una discusión con el que reclama estae tema puede poner en cuestión este estatuto. Reconociendo el amplio margen de discrecionalidad de la Comisión en esta materia, subraya que en este caso se ofrece a la institución una buena oportunidad para clarificar sus prácticas en este ámbito.
El Tratado de Lisboa obliga a la Unión a mantener un diálogo abierto, transparente y regular con las iglesias, las asociaciones religiosas las organizaciones filosóficas y no confesionales.