Luego de año y medio, el pleno de la Comisión Permanente del Congreso realizó la declaratoria de constitucionalidad de la reforma al artículo 24 de la Carta Magna en materia de libertad religiosa.
Luego de año y medio, el pleno de la Comisión Permanente del Congreso realizó la declaratoria de constitucionalidad de la reforma al artículo 24 de la Carta Magna en materia de libertad religiosa.
La reforma fue aprobada por 16 congresos locales, es decir apenas los necesarios para llevar a cabo la declaratoria, mientras que se recibieron cuatro votos en contra de los congresos de Michoacán, Morelos, Oaxaca y Zacatecas.
La declaratoria se da en medio del escándalo de la alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, quien en días pasados "entregó" la capital de Nuevo León a Jesucristo, en un actoo organizado por las Alianzas de Pastores de Monterrey.
La nueva redacción del artículo 24 establece que toda persona tiene derecho a la libertad de convicciones éticas, de conciencia y de religión, y a tener o adoptar, en su caso, la de su agrado. Estipula que esa libertad incluye el derecho de participar, individual o colectivamente, tanto en público como en privado, en las ceremonias, devociones o actos de culto respectivo, siempre que no constituyan un delito penado por la ley.
Además, agrega que nadie podrá utilizar los actos públicos de expresión de esta libertad con fines políticos, de proselitismo o de propaganda política.
En la sesión, el diputado del Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal, acusó tanto al gobernador de Chihuahua, César Duarte, como a la alcaldesa Arellanes de violar los principios de laicidad y la Constitución.
"Ellos justifican que eran actos privados, pero no puede de ninguna manera permitirse eso, violaron la Constitución, violaron el Estado laico y este Congreso debería someterlos a juicios de responsabilidad. No creo que lo haga", sostuvo.
El senador perredista Ar-mando Ríos Piter, en tono irónico, recordó que en su momento, el PRI y PAN trataron de sacar la reforma que iba en contra de la laicidad para ver quien quedaba mejor en la visita del entonces papa Benedicto XVI.
