Mercedes Puyol (Madrid, 1955), licenciada en Filosofía y Letras y Periodismo, que desempeñó durante 25 años tareas de redacción e investigación en RNE, publica en el último número (27) de la revista FerrolAnalisis, que edita el Club de Prensa de Ferrol, un trabajo en el que atribuye al Vaticano la pérdida de una valiosa documentación sonora, con composiciones antiguas, que Franco regaló a Pío XII en 1950, Año Jubilar. La autora titula “La música del Concordato, la joya española que perdió el Vaticano”. La ofrenda consistía en un micro de plata labrada y una arqueta artesana que contenía las grabaciones de una selección de obras de cuatro siglos de música sacra española (Misteri, Cantigas, fragmentos del Códice Calixtino, Cancionero de Palacio y música de la corte de los Reyes Católicos, villancicos, cantos marianos…) en cuya elaboración participó también Radio Nacional de España que no tuvo la cautela de quedarse con una copia. De todo aquello, en el Vaticano solo dan pistas del micro y el arca. Se perdió el contenido y se “salvó” el continente.
Olfato investigador
Mercedes Puyol desplegó toda su iniciativa y olfato investigador a través de múltiples pesquisas, viajes, conversaciones con personalidades vaticanistas, coetáneos españoles, consultas y testimonios de toda índole. Aunque su loable empeño resultó infructuoso en cuando al hallazgo “con vida” del tesoro cultural que se suponía debidamente custodiado en Roma, nos quedó, sin embargo, una muestra, rica en matices, del género periodístico de investigación en el que, además de la tenacidad, elemental en estos trabajos, la autora pone de manifiesto, casi con sentido didáctico para los profesionales del oficio, las claves que se deben seguir en este tipo de casos. Debemos añadir que la idea de la ofrenda nace de un contexto de aislamiento que en ese momento sufre España y de la necesidad de estrechar lazos con la Iglesia.
Pecados culturales
Tras meses de contactos, la investigadora sugiere que es posible que nunca se llegaran a utilizar esos documentos: discos, cintas magnetofónicas, films “y que quedaran arrumbados entre la inmensidad de presentes que reciben los Papas” para acabar siendo destruidos o desechados. Mercedes Puyol concluye “No tenemos el conocimiento musical suficiente para apreciar la magnitud de la pérdida, pero intuimos que es importante y lamentamos profundamente el poco fruto patrimonial y musical de esta investigación, y constatamos que, incluso, el Vaticano comete pecados culturales”.
Micro que, junto con la arqueta que contenía una selección de música sacra, regaló el dictador Franco a Pío XII en 1950 /FerrolAnalisis
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