El Tribunal Supremo italiano ha anulado la condena a siete meses de cárcel y la suspensión del ejercicio de la carrera al juez Luigi Tosti, quien suspendió tres audiencias porque había un crucifijo en la sala, informaron hoy los medios de comunicación italianos. El Supremo italiano consideró que el juez no cometió el delito de "omisión en acto de servicio e interrupción del servicio público " por la que había sido condenado en mayo de 2007 por el Tribunal de Apelación de la provincia de L 'Aquila (centro), ya que las audiencias previstas fueron celebradas por otro magistrado .
De España a Suecia: los países europeos discrepan sobre los símbolos religiosos en cargos públicos
Mientras Berlín reconsidera su controvertida política de laicismo, Europa sigue debatiendo los límites de la expresión religiosa en…





