“En vez de emplear tanta energía en hacer política desde los altares, los máximos responsables de esta institución deberían cumplir la Constitución a la que están obligados como el resto de la ciudadanía”, afirmó Montaño.
No al PSOE
Con estas declaraciones, la dirigente socialista respondía a la Conferencia Episcopal, organismo que la semana pasada aconsejó no votar a un partido como el PSOE. “No todos los programas son igualmente compatibles con la fe”, aseguraron los obispos inmediatamente después de pedir el voto para aquellas formaciones políticas que no negocien con ETA y que estén en contra del matrimonio homosexual, el aborto, la eutanasia, o la asignatura de Educación para la Ciudadanía.
Conventos de clausura
“Que ellas estén encerradas rezando, mientras ellos ocupan la dirección de la institución, es justamente lo contrario de lo que ordena la Constitución”, subrayó Montaño, quien irónicamente recordó que los conventos de clausura, “con una proporción de diez a uno con respecto a los hombres”, es el ámbito donde la presencia de las mujeres es mayor.
Segundo plano
En definitiva, la secretaria federal del PSOE aboga porque los obispos dejen de lado la política y dejen “de relegar a las mujeres en un segundo plano, ya que tienen vedada su presencia no ya en la dirección, sino incluso en la propia ordenación sacerdotal”.