El núcleo local del Partido Comunista de España (PCE) en Águilas ha pedido al gobierno municipal, y en especial a la alcaldesa Mari Carmen Moreno, que respete la aconfesionalidad del Estado que marca nuestra constitución. De acuerdo con el artículo 16.3, ninguna religión puede tener un carácter estatal ni los poderes públicos beneficiar credo alguno.
En Águilas conviven pacíficamente cristianos católicos con evangelistas, protestantes, judíos, musulmanes, budistas y otras creencias minoritarias. Sin embargo, denuncian desde el PCE local que “el PSOE aplica en la gestión municipal una política claramente favorable a sólo uno de esos grupos sociales, el católico, vulnerando así claramente el principio de aconfesionalidad”.
“El Estado aconfesional salta por los aires en Semana Santa”, declara Óscar Pérez, portavoz del grupo comunista aguileño. La presencia de ministros y militares en los actos religiosos, la bandera a media asta en instituciones públicas por la muerte de Jesús de Nazaret o los indultos penitenciarios a propuesta de cofradías ponen en cuestión la aconfesionalidad que marca nuestra constitución. “Es una muestra de que el nacional-catolicismo franquista sigue asentado en nuestras instituciones y en algunos partidos”.
Águilas no se ha mantenido al margen de la polémica, pues los ediles socialistas, y entre ellos la alcaldesa, han presidido el cierre de las distintas procesiones católicas. “Es un caso especialmente cínico”, denuncia Óscar Pérez, “pues mientras el PSOE defiende a nivel estatal la laicidad, en Águilas aplican una política ultracatólica que les lleva a presidir actos religiosos e incluso a aumentar las subvenciones de dinero público concedidas a asociaciones religiosas”.
Desde el Partido Comunista apuestan por un modelo laico, es decir, aquel donde existe la libertad de culto, la separación real entre instituciones gubernamentales y religiosas y donde el Estado no intercede a favor de credo alguno.