La Cámara saca adelante la iniciativa gracias al apoyo de los tres partidos de la oposición y el rechazo del PP, que no dispone de mayoría absoluta
IU acusa al ministro de Wert de querer «imponer doctrinas», y los socialistas le acusan de haber dado «alas» a los obispos
El Parlamento de Extremadura aprobó este viernes, gracias a la mayoría simple lograda con los votos de los tres partidos de la oposición, PSOE, IU-Verdes y PREx-CREx, y con el rechazo del PP, una propuesta de pronunciamiento de la Cámara por la que insta al Gobierno de España a retirar el currículo de la asignatura de Religión. El PP no dispone de mayoría absoluta en la Cámara.
La iniciativa fue presentada por IU, cuyo diputado Víctor Casco exigió la retirada del nuevo currículo al considerar que el ministro de Educación, José Ignacio Wert, «ha decidido imponer doctrinas» que «nada tienen que ver con lo humanístico, con la enseñanza laica». En su exposición, leyó algunos de El Parlamento de Extremadura pide al Gobierno la retirada del currículo de la asignatura religiónlos contenidos del currículo como la que hace referencia a la alegría de los alumnos de que Dios les haya creado, ante lo cual Casco se ha preguntado «cómo se evalúa esto científicamente».
En cualquier caso, considera que el motivo «fundamental» por el que se opone a este currículo se encuentra al final del texto, cuando se refiere al «despertar del amor de Dios» para niños de 3 y 4 años, aplicando en los alumnos, según Casco, el método de Pavlov, repitiendo una y otra vez preceptos religiosos.
Casco, que se definió como ateo militante, se mostró «absolutamente contrario» a la presencia de Religión en las aulas, y asimismo consideró «triste» que estos tengan que elegir entre cursar valores cívicos y religión. Asimismo, dijo que el currículo aprobado por Wert es «todavía peor» que el anterior, vigente desde 2007.
La iniciativa pudo aprobarse gracias a que los regionalistas del PREx-CREx cambiaron su intención de voto a última hora. Su portavoz, Damián Beneyto, en su turno de palabra, había defendido que la enseñanza de Religión no se limita a la repetición de preceptos religiosos, al tiempo que reconoció que hay cuestiones del currículo de Wert que no le gustan.
Beneyto leyó una carta de una misionera extremeña en Tegucigalpa, que refleja la labor que realizan religiosos en el mundo, y que cree que debería formar parte de la Religión que se enseña en los centros educativos. A su vez, Casco le replicó que esta «parte de la iglesia extraordinaria» a la que se ha referido el diputado de la formación regionalista no es la que se va a enseñar en las aulas, sino otra que han «impuesto los obispos» y que el ministro Wert ha aceptado.
Por este motivo, le pidió a Beneyto que reconsiderara su voto, al tiempo que le recordó que también hay religiosos que se han posicionado en contra de la «auténtica barbaridad» que supone este currículo, lo cual ocurrió posteriormente en la votación, permitiendo que saliera adelante.
Dar «alas» a los obispos
Por su parte, el diputado del Grupo Socialista Antonio Gómez Yuste criticó que el Gobierno del PP haya dejado a los obispos «a su libre albedrío», permitiendo así que la enseñanza de Religión haya retrocedido «dos décadas» en España.
Igualmente, arremetió contra la ley educativa del ministro Wert, la Lomce, que ha supuesto un «refresco energético que ha dado alas a los obispos» españoles, convirtiendo la Religión en una asignatura específica y evaluable. En este sentido, señaló que cuando Pedro Sánchez, el secretario general de los socialistas, esté en la Moncloa, sacará la Religión del currículo.
Asignatura voluntaria
Por último, la diputada del Grupo Popular Pilar Vargas defendió el derecho de los padres a elegir la educación religiosa de sus hijos así como la vigencia de los acuerdos suscritos con los representantes de las religiones para la enseñanza en las aulas.
Así, dijo que el Ministerio de Educación, en cumplimiento de los acuerdos con la Santa Sede, es el encargado de «supervisar» que el currículo elaborado por la Conferencia Episcopal no vulnere la Constitución. Vargas reiteró igualmente que la asignatura de Religión es una oferta de carácter voluntario para el alumno y la familia, por lo que pidió que se respete el derecho a la libertad de elección de los padres.
