COMENTARIO: Por mucho que el autor del artículo pretenda justificar estos dispendios, no parecen ni ejemplares, ni acordes con la propia doctrina de la que afirman ser seguidores. En todo caso se puede ir con un calzado cómodo sin tener que llevar unos zapatos o unos trajes de alta costura. Una de las muchas contradicciones que no se quieren ver. La iglesia ha sido un ejemplo de lujo y derroche como forma de simbolizar su poder terrenal, bajo el pretexto de que todo es poco para dios y sus "representantes".
La cabeza visible de la Iglesia Católica debe cumplir con numerosas obligaciones en su día a día; recepciones, eucaristías, y demás actos oficiales en los que Benedicto XVI debe permanecer horas y horas de pie, por eso la comodidad es una de sus máximas y no nos extraña que para cuidar su calzado haya elegido a una de las mejores firmas: la italiana Prada.
De esta forma, el Sumo Pontífice siempre acude a sus viajes con unos zapatos rojos creados por esta gran casa de la moda italiana. Comodidad y estilo que presentan a un Papa cargado de glamour y elegancia en cada uno de sus actos.
Pero Benedicto XVI no es el único miembro de la Iglesia Católica que aporta un toque de distinción a sus looks. Este domingo, el obispo Domenico Mogavero oficiará una misa vestido con un paramento de Armani.
Esta decisión ha causado un gran revuelo y ha originado numerosas críticas que acusan a los miembros de la Iglesia Católica de no predicar con el ejemplo.
Es por ello que Domenico Mogavero se ha visto obligado a aclarar la situación y ha comentado que su traje no lo había comprado él sino que se trataba de un regalo que recibió en 2011 por parte del diseñador italiano.
"No lo he elegido por moda, sino como un gesto de reconocimiento a un creador que ama Pantelleria (la ciudad en donde se oficiará la misa) y para poner el gusto de la belleza al servicio del culto y de Dios", explicó Mogavero a la prensa local.
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