Un total de 160 religiosos, entre ellos un obispo auxiliar de Tarragona, asesinados durante la Guerra Civil serán beatificados próximamente, informó ayer el Vaticano. Según datos de la Iglesia española, los «mártires del siglo XX», como denomina a los religiosos asesinados durante la Segunda República y la Guerra Civil, pueden ser unos 10.000. Ya han sido beatificados un millar y proclamados santos once.
Benedicto XVI también reconoció las «virtudes heroicas», primer paso hacia la santidad, del obispo español Álvaro del Portillo y Díez de Sollano (1914-1994), sucesor de San Josemaría Escrivá de Balaguer al frente del Opus Dei; y del sacerdote español Cristóbal Fernández Valladolid (1638-1690).