El obispo de Córdoba dice que el aborto causa "más muertos que la guerra". En efecto, se estima que más de un tercio del total de las fecundaciones acaba en abortos «naturales», no provocados, que a menudo se confunden con reglas intensas. Parece claro que la incidencia de estos abortos es superior a la de los inducidos (unos 45 millones al año en el mundo). Según la creencia del obispo de Córdoba, ¿quién es responsable de esos abortos no inducidos, sino Dios? Él solo da cuenta de más abortos que todos los malvados humanos juntos. Es el sumo hacedor de esta "verdadera sangría". Hagan números y verán que cada año se apunta probablemente más "asesinatos" que Hitler y Stalin juntos en toda su vida, aproximadamente tantas muertes como en toda la II Guerra Mundial. Dios es el Supremo Abortista.
El extraño caso de los contravalores religiosos privilegiados frente a los valores democráticos · por Juan Antonio Aguilera Mochón
Hace falta que en la política y en la sociedad se extienda la conciencia de que para que…