El fallo defiende la actuación del Consistorio, que trasladó la talla a la residencia de Ciaño, al no vulnerar derechos o sentimientos religiosos
Los tribunales dan la razón al Ayuntamiento de Langreo en la retirada de la imagen de la Virgen del Carbayu de las dependencias municipales. El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 4 de Oviedo desestimó el recurso interpuesto por un particular en representación de la Sociedad de Festejos «Virgen del Carbayu», que reclamaba que la talla volviese a la hornacina que ocupó durante cerca de 60 años en la Casa Consistorial, desde donde fue trasladada, el 30 de septiembre del pasado año, a la capilla de la residencia de personas mayores de Ciaño, gestionada por Mensajeros de la Paz.
A la vista de la Constitución y de la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, el juez falla que «no puede considerarse» que la decisión de retirarar la imagen de las dependencias municipales «haya vulnerado derecho alguno de los recurrentes ni puede considerarse que afecte a sus sentimientos religiosos o creencias hasta el punto de afectar a sus derechos fundamentales y exigir una intervención judicial como la que la parte actora reclama».
El recurso presentado en el Ayuntamiento tanto contra la aprobación de la moción de adhesión a una red de municipios por un Estado laico como contra la retirada de la talla de la Virgen del Carbayu del Consistorio había sido denegado. Y el siguiente paso fue acudir al juzgado. El tribunal no aprecia que el pleno municipal y la Alcaldía «hayan vulnerado procedimiento alguno». Señala asimismo que el Ayuntamiento tiene competencias para adoptar la resolución de adhesión a una red de municipios que propugna el desarrollo de la laicidad.
El Ayuntamiento vivió, ya antes de la retirada de la imagen de la hornacina, una semana tensa. El momento de mayor crispación se produjo cuando concejales del gobierno local (IU-Somos) fueron increpados por decenas de vecinos en el acto de entrega de 5.482 firmas contra la retirada de la imagen. Tres días después, a las tres de la tarde, un operario municipal se encaramaba a una escalera para acceder junto a otro trabajador a la efigie mariana. Posteriormente era trasladada.
La sentencia no es firme aunque la Sociedad de Festejos «Virgen del Carbayu», representada por la abogada Ángela Romero, no prevé recurrir.