Los objetivos y operaciones del grupo, y los desafíos que plantea, son similares a los de los grupos terroristas más temidos en otros países africanos. Estos son, en particular, Al Shabaab en Somalia y Boko Haram en Nigeria.
El terrorismo es un problema global que afecta a muchos países. Sin embargo, hasta 2017, el sur de África se salvó en gran medida de este fenómeno. El sangriento conflicto desatado por Ansar al-Sunna en el norte de Mozambique ha cambiado desde entonces el panorama de seguridad de la región.