El Estado Islámico se ha atribuido este jueves la autoría del atentado cometido en Londres junto al Parlamento británico que causó cuatro muertos, entre ellos el agresor, según ha comunicado la agencia de noticias Amaq, vinculada a la organización terrorista.
El comunicado, difundido a través de redes sociales y cuya veracidad no ha podido ser comprobada, identifica al autor del ataque como un «soldado» del Estado Islámico. La agencia, que cita «una fuente de seguridad», afirma que el agresor realizó la operación «en respuesta» al llamamiento del grupo yihadista a cometer ataques contra los ciudadanos de los países que forman parte de la «alianza» contra el terrorismo.
Los yihadistas han utilizado la misma fórmula empleada con otros ataques. Por ejemplo, la organización terrorista también indicó que «un soldado del califato» fue el responsable del atentado contra un mercado navideño en Berlín el pasado 19 de diciembre en el que murieron doce personas. Entonces y también vía Amaq, indicó que actuó «en respuesta a los llamamientos a atacar a los ciudadanos de los países de la coalición internacional».
El agresor arrolló con su coche a varias personas en el puente de Westminster, después descendió del vehículo y apuñaló a un policía a las puertas del Parlamento británico. Cuatro personas murieron, incluidos el agresor, el policía, otro hombre y una mujer, y otras 29 personas resultaron heridas.
Los heridos son 12 británicos, tres niños franceses, dos rumanos, cuatro surcoreanos, dos griegos, un alemán, un polaco, un irlandés, un chino, un italiano y un estadounidense, según informaciones ofrecidas por la primera ministra, Theresa May en la Cámara de los Comunes.
Según ha revelado la premier, el autor del atentado nació en Reino Unido y fue investigado en el pasado por el MI5 por extremismo violento pero como «figura periférica» y actualmente no estaba en el radar de los servicios antiterroristas.