El arzobispado admite que el expresidente de la Conferencia Episcopal recibió en persona una “queja” sobre el sacerdote, pero la tramitó como un “asunto moral” y no lo apartó
El arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, se reunió en marzo de 2022 con un joven que señaló por abusos sexualesal sacerdote Jorge Alexander P. M. pero no apartó al cura ni abrió un proceso contra él, sino que trató la denuncia como un “asunto moral”. El párroco en cuestión ha sido detenido ahora, dos años y ocho meses después, por presuntos tocamientos a otro adulto y a un menor de edad en fechas recientes. El joven que se vio con Omella ha contado a EL PAÍS, bajo condición de anonimato, que en esa entrevista contó cómo Jorge Alexander frotó su miembro erecto contra él sin su consentimiento a finales de 2021. El arzobispado de Barcelona ha admitido, a preguntas de este diario, que se produjo la entrevista, en la que Omella recibió una “queja” contra el párroco, pero no ha aclarado por qué no actuó contra él.