Un informe independiente reveló que un abogado cristiano ya fallecido abusó de más de un centenar de menores en Reino Unido, Mozambique y Sudáfrica, y que Justin Welby evitó tomar medidas contundentes
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, máxima figura de la Iglesia anglicana tras el rey Carlos III, ha anunciado su dimisión, tras admitir su mala gestión en un caso de abusos a menores, oculto durante décadas y que provocó al menos un centenar de víctimas, entre Reino Unido y África. “Creo que apartarme es lo mejor para la Iglesia de Inglaterra, a la que amo profundamente y a la que he tenido el honor de servir”, ha anunciado.