El Arzobispado de Madrid ha recordado hoy al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, que mañana casará a una pareja de homosexuales, que el matrimonio sólo puede ser contraído por personas de distinto sexo. Además, le advierte de que la doctrina de la Iglesia obliga a todos los fieles católicos, incluidos "los políticos católicos". Por su parte, el secretario general del Grupo Popular ha señalado hoy que este "desafío" debe tener "consecuencias políticas".
En una nota de prensa, el Arzobispado ha dicho que "el matrimonio no puede ser contraído más que por personas de diverso sexo: una mujer y un varón", como expuso Benedicto XVI en el V Encuentro Mundial de las Familias celebrado en Valencia. "La verdad sobre el matrimonio debe ser respetada y promovida por la legislación civil y no son aceptables ni las equiparaciones de las llamadas uniones homosexuales con el verdadero matrimonio, ni mucho menos una definición legal del mismo, como ocurre en la vigente legislación española", explica la institución eclesiástica en el comunicado.
Para el Arzobispado, la legislación permite que el matrimonio "deje de ser considerado jurídicamente como la unión del hombre y la mujer quedando así vaciado de su valor y de su contenido insustituible para el bien común, que exige como base ineludible el verdadero matrimonio y la familia".
"Esta doctrina obliga a todos los fieles católicos, incluidos los políticos católicos según la responsabilidad que les es propia, a tener especialmente presente que todo reconocimiento legal, teórico y práctico de las llamadas uniones homosexuales contribuye a ofuscar valores fundamentales que no sólo pertenecen a los creyentes, sino al patrimonio común de la Humanidad", concluye el Arzobispado de Madrid.
"Profunda deslealtad"
Alberto Ruiz Gallardón celebrará mañana su primera boda homosexual: la del militante del PP Javier Gómez y su novio, Manuel Ródenas. A la ceremonia no acudirán ni la ex ministra Ana Pastor -miembro de la Ejecutiva del partido- ni Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad y del PP de Madrid, ambas invitadas. El concejal socialista Pedro Zerolo ha tachado la iniciativa del alcalde de "oportunista e hipócrita", mientras la asociación estatal de gays reclama al PP que retire el recurso de inconstitucionalidad contra la ley que permite las bodas homosexuales.
Además y por su parte, el diputado del PP y secretario general del Grupo Popular en el Congreso, Jorge Fernández Díaz, acusó hoy de "desleal" al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, por anunciar su intención de oficiar una boda entre homosexuales este fin de semana. A su juicio, este "desafío" del primer edil madrileño "debe tener consecuencias políticas".
Fernández Díaz recordó que el PP votó en contra de la ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo y también ha presentado un recurso de inconstitucionalidad, por lo que el alcalde "tiene la obligación de ser leal con su partido, sea o no católico".
"El señor Ruiz Gallardón, que es un dirigente destacado del Partido Popular, tiene que ser leal al partido, con independencia de que sea católico, mahometado o mormón. Ese es su problema, pero tiene la obligación de ser leal con su partido y acatar sus decisiones", enfatizó.
En este sentido, Fernández Díaz insistió en que si finalmente el alcalde madrileño oficia esta boda homosexual irá "en contra de la decisión adoptada por los órganos de gobierno del PP", lo que constituiría "una profunda deslealtad" que "desde luego debe tener consecuencias políticas".