Habría ocurrido en la década de 1980, según se ha conocido este martes 16 de julio
El Arzobispado de Barcelona ha apartado a un sacerdote acusado de presuntos abusos en la década de 1980 y no podrá ejercer ni oficiar celebraciones litúrgicas en la diócesis, informan este martes 16 de julio a Europa Press fuentes del Arzobispado.
La diócesis le abrió expediente el mes pasado y también recogió el testimonio de una de las presuntas víctimas. Por último ha apartado del servicio al religioso, que ejercía en una parroquia de Barcelona, según publica este 16 de julio Ara.
El Arzobispado enviará su informe a la Conferencia Episcopal Tarraconense y a la diócesis de Taiwán, dado que el párroco se incardinó como sacerdote allí, para que puedan tomar las medidas que consideren necesarias.
El sacerdote ahora apartado fue mencionado en un reportaje de este periódico sobre la Casa de Santiago, un instituto eclesiástico fundado en los años 60 para fomentar vocaciones sacerdotales tardías. Los presuntos abusos ocurrieron en una parroquia de Santa Coloma de Gramenet (Barcelonès), donde colaboraba.
Según el diario, fuentes diocesanas indican que no se pudo actuar en el momento de los presuntos hechos porque en esos años era laico y el código canónico de la época no contemplaba medidas contra los laicos de la Iglesia denunciados por abusos sexuales.
