En la ribereña localidad sevillana de Alcalá del Río, se celebró la procesión de traslado del Santo Patrón Ilipense, San Gregorio de Osset, doctor de la Iglesia, vecino de la localidad y alcalde perpetuo de la villa.
La procesión partió desde la Real Ermita de San Gregorio de Osset (edificada por San Fernando y dedicada por los Reyes Católicos en 1460), hasta la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción, para sus cultos anuales de novena y sus fiestas y feria del municipio.
En esta edición el traslado de Santo Patrón le correspondió a la Hermandad de la Vera-cruz de la corporación del Jueves Santo. El cortejo se inicio con la Cruz Parroquial y dos ciriales de guía, seguido de junta de gobierno de la Vera-cruz, a continuación las autoridades del Municipio, con su alcalde al frente, Antonio Campo Ruiz (PSOE) junto con el párroco de la localidad el Rvdo. Fernando Reyes Rico, además de las representaciones de las hermandades y Cofradías de la localidad y la feligresía parroquial. Figuran seguidamente los acólitos incensando, que antecede al paso del Santo Patrón, que llevaba un gran ramo de flores de claveles y nardos blanco que es el color de la pureza, la bondad y la paz. Estas flores viene de la floristería María Jesús de la localidad. Muy expresiva la imagen de San Gregorio de Osset en su paso, en una procesión sin aglomeraciones. Esta procesión conocida popularmente como de “bajada”, es debido al desnivel orográfico entre su Real Ermita y la Parroquia Ilipense, que discurrió por las calles céntricas de la villa. Con una cuadrilla de portadores a hombros de la corporación del Jueves Santo, estuvieron mandando en el martillo los encargados de paso del Santo, Rogelio Hernández Ramos y Aurelio Olmedo Barroso. Detrás del paso del Santo Patrón una ingente cantidad de fieles y devotos en grupos sin orden determinado.