Los estados se clasifican de acuerdo con el número de leyes que protegen el libre ejercicio de la religión, y los estados con más leyes que proporcionan salvaguardias para la libertad religiosa se clasifican como los más altos.
Una organización jurídica sin ánimo de lucro especializada en casos de libertad religiosa ha realizado un estudio en el que se comparan los estados de EE.UU. en función de la libertad de sus residentes para practicar su fe.
Alerta de spoiler: Mississippi ofrece la mayor protección de la libertad religiosa, mientras que Nueva York ocupa el último lugar en el índice «Libertad religiosa en los Estados 2022 (RLS)» del First Liberty Institute.
Los estados se clasifican de acuerdo con el número de leyes que protegen el libre ejercicio de la religión, y los estados con más leyes que proporcionan salvaguardias para la libertad religiosa se clasifican como los más altos.
Sarah Estelle, investigadora del Centro para la Religión, la Cultura y la Democracia (CRCD) del Instituto y profesora asociada de economía en el Hope College de Michigan, dirigió el proyecto. Analizó las leyes de los 50 estados y redujo el índice a 29 leyes distintas, la mayoría de las cuales ofrecen protección a los profesionales de la medicina, permitiéndoles optar por no practicar abortos, esterilizaciones y anticonceptivos.
Mississippi, por ejemplo, obtuvo una puntuación de 20 sobre 20 en las leyes que permiten a los trabajadores sanitarios negarse a participar en procedimientos o servicios que vayan en contra de sus creencias religiosas.
En comparación, Nueva York, en el puesto 50, sólo obtuvo una puntuación de 5 sobre 20 en cuanto a las leyes de exención sanitaria. Los médicos del Estado del Imperio no tienen ninguna protección legal si se niegan a realizar esterilizaciones o a recetar anticonceptivos, ni el Estado les protege de la responsabilidad penal si se niegan a realizar abortos.
Cinco estados -Alabama, Illinois, Mississippi, Nuevo México y Washington- han promulgado «disposiciones generales de conciencia», que no especifican el tipo de atención médica cubierta, pero ofrecen protección a quienes se niegan a participar en cualquier servicio médico que sea contrario a sus creencias.
Estelle explicó a que estos cinco estados «puedan considerarse modelos» para los estados que estén considerando promulgar protecciones de libertad religiosa para los trabajadores de la salud.
«La protección más amplia que un estado puede ofrecer a los profesionales de la salud es una disposición general de conciencia», dijo a CNA.
Una disposición general de conciencia protegería a los profesionales sanitarios que se negaran a participar en tratamientos para transexuales, por ejemplo. Estelle dijo que la encuesta del próximo año podría reflejar los cambios de opinión del público sobre estos tratamientos.
«Si la preocupación por procedimientos sanitarios específicos estimula el cambio de leyes en áreas existentes, por ejemplo, animando a más estados que los actuales a codificar disposiciones generales de conciencia en materia de atención sanitaria, también lo veremos cuando actualicemos nuestros datos cada año», dijo.
Otras salvaguardias incluidas en el índice son las leyes relativas al voto en ausencia (si los estados tienen leyes que reconocen las fiestas religiosas como una razón legítima para votar en ausencia), los requisitos de vacunación infantil y la libertad de negarse a participar en bodas del mismo sexo.
Varias áreas de leyes no incluidas en el índice están en el centro de las actuales disputas legales sobre la libertad religiosa. El estudio señala que no se han tenido en cuenta en la clasificación las cuestiones relativas a las becas financiadas por el Estado para las escuelas religiosas, la adopción y la acogida, la discriminación en el empleo y el trato a los presos.
En algunos casos, esas cuestiones implicaban leyes federales, por lo que no era posible hacer comparaciones entre estados. Para su índice inaugural, los investigadores decidieron limitar sus criterios a un conjunto de leyes estatales de libertad religiosa, que, según señalan en la introducción del índice, ofrece un «esbozo» de las protecciones de la libertad religiosa en Estados Unidos.
«Para obtener una comprensión precisa de la libertad religiosa en Estados Unidos, debemos comenzar nuestro esbozo con el nivel de base antes de pasar a examinar otros fenómenos que refuerzan, debilitan o dejan intactos estos elementos fundacionales», escribió Jordan J. Ballor, director de investigación del CRCD, en la introducción del estudio.
El estado de Mississippi se encuentra en el puesto número 1 mientras que el de Nueva York se encuentra en el último puesto.
Para ver el estudio completo y conocer su metodología, visite el sitio web del First Liberty Institute.
