La embestida del Partido Republicano (PR) en las elecciones a Consejeros Constitucionales del pasado 7 de mayo, fue la confirmación de un proyecto político que venía creciendo desde las elecciones presidenciales de 2017, cuando su máxima figura, José Antonio Kast, logró un sorprendente 8% de votos en primera vuelta. Desde entonces, el partido no ha dejado de crecer hasta convertirse en la mayor fuerza política del país.
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