Doce personas murieron este jueves en Jos (capital del estado de Plateau, norte de Nigeria) en enfrentamientos entre cristianos y musulmanes, informaron fuentes oficiales citadas hoy por el diario "The Punch".
El responsable de comunicación de Plateau, Abraham Yiljap, afirmó que sesenta personas han sido detenidas en relación con los actos de violencia, en los que se incendiaron dos iglesias, una escuela islámica y una veintena de edificios.
Entre los muertos figuran un agente de policía y su esposa, así como cuatro hijos de un concejal.
Yiljap indicó también que se ha impuesto un toque de queda de 24 horas en Jos, al precisar que se desconoce con exactitud el motivo de esta nueva ola de violencia en Nigeria (de mayoría musulmana en el norte y cristiana en el sur).
El diario "Leadership", citando como fuente a un residente local, aseguró que los disturbios estallaron por las represalias emprendidas después de que pastores musulmanes supuestamente mataran a tres jóvenes cristianos.
Sea como fuere, cristianos y musulmanes mantienen una eterna lucha en la zona por el poder político y la propiedad de la tierra, entre otras razones.
Con alrededor de 150 millones de habitantes, que se integran en más de 200 grupos tribales, Nigeria -el país más poblado de África- sufre múltiples tensiones por profundas diferencias políticas, religiosas y territoriales entre sus comunidades.