La Policía Nacional ha detenido en Vitoria a un argelino de 36 años por su presunta integración en Daesh. El arrestado, presidente de una reconocida asociación cultural del País Vasco, había desarrollado en los últimos años labores de propaganda y captación de nuevos miembros para la banda terrorista. Entre sus proyectos se encontraba el de crear una escuela para adoctrinar desde la infancia a los niños musulmanes que acudiesen a ella.
Según ha informado el cuerpo, el argelino percibía ayudas económicas por desempleo al tiempo que obtenía recursos de un negocio propio encubierto de venta por Internet. Las pesquisas policiales indican que su intención era destinar estas ayudas sociales al mantenimiento de adoctrinados que después apoyarían su idea de reconstruir el caído califato de Daesh.
A raíz de la investigación, la Policía Nacional descubrió que el detenido también intentaba captar nuevos miembros mediante las redes sociales. A través de la Red logró adoctrinar a una persona a la que, de manera sistemática, enviaba material audiovisual con el objetivo de inocular en ella el pensamiento de «hacer la yihad». También trataba de aislarla de su familia y la emplazaba a aprender marketing en línea e idiomas para distribuir más fácilmente la propaganda de la banda terrorista bajo la consigna de que «ahí empezará la ayuda verdadera».
Lo cierto es que, a tenor de la información facilitada por Interior, el yihadista no se caracterizaba por su sutilidad. La Policía Nacional ha informado de que alardeaba de su autoformación en la elaboración de artefactos explosivos, lo cual impulsó la investigación para «neutralizar la amenaza».
El arrestado también perpetró ataques físicos contra la Policía. En una ocasión fue arrestado por atentado contra la autoridad tras agredir a una pareja de agentes. También amenazó con un arma blanca a otros efectivos que realizaban labores propias de su cargo al grito de «voy a matar policías».
La investigación, que ha contado con la colaboración del Centro Nacional de Inteligencia y Europol, se ha desarrollado bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción Número 2 y la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
