Un alemán asegura haberle visto sin él en reiteradas ocasiones durante la visita de Benedicto XVI a Alemania
Un ciudadano alemán ha presentado una denuncia contra Benedicto XVI por no llevar el cinturón de seguridad abrochado cuando viaja en su papamóvil, según informa en su edición de el diario Westfälische Rundschau.
El demandante, de la ciudad de Dortmund (oeste del país), afirma en su denuncia haber observado reiteradamente, durante la última visita del papa a Alemania, que éste no iba atado, lo que contraviene las normas de circulación. El ciudadano afirma además que tiene dos testigos presenciales dispuestos a certificar que efectivamente el papa no llevaba el cinturón abrochado.
Según ha expuesto, varias de las personas que acompañaban a Joseph Ratzinger en su visita, como el presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, Robert Zollitsch, debieron de observar la infracción y podrían, por tanto, sustentar su testimonio.
De acuerdo con el diario, el demandante, al que se identifica como "no creyente", actúa movido con la preocupación por la seguridad del papa y recuerda que el papamóvil está equipado con cinturón de seguridad.
Ese medio, que se remite a declaraciones del abogado del demandante, apunta que la viabilidad de la demanda puede depender de si se considera a Benedicto XVI simple ciudadano alemán o jefe de Estado (Vaticano), ya que podría acogerse a la inmunidad diplomática de su cargo aunque se probase la infracción.