La denuncia se ha producido durante una jornada de debate sobre el Plan Cornisa de San Francisco-Seminario, acordado entre el Ayuntamiento de Madrid y el Arzobispado de Madrid, aprobado por la Junta de Gobierno el pasado mes de julio y pendiente de ser elevado al Pleno en los próximos meses.
El convenio final, fruto de más de veinte años de negociaciones entre las autoridades católicas en Madrid y el Ayuntamiento, otorga al Arzobispado 19.000 metros cuadrados de edificabilidad, que sumandos a otros 6.000 metros cuadrados obtenidos en un acuerdo anterior, alcanzarían 25.000 metros cuadrados de nuevos edificios en el histórico parque de la Cornisa, ha denunciado la concejala de IU, Milagros Hernández.
Gracias a la edificabilidad ganada, la edil de IU ha recordado que el Arzobispado prevé erigir sobre esta "valiosa" zona verde, por su interés paisajístico e histórico, un "pequeño Vaticano" compuesto por una Biblioteca Diocesana, una Casa de la Iglesia, una Residencia para Sacerdotes, oficinas del Arzobispado y un aparcamiento, todos de "uso privado y exclusivo para el Arzobispado".
El Ayuntamiento, que según Hernández ha redactado el plan "al dictado" del Arzobispado, "da el visto bueno a una tropelía" que "destruirá más de 15.000 metros cuadrados de zonas verdes protegidas, que desde hace siglos son un espacio de recreo y paseo para niños y mayores y un símbolo paisajístico, histórico y monumental de Madrid".
María Ruiz de Gauna, presidenta de la Asociación de Vecinos Cornisa-Vistillas, ha denunciado, además, la progresiva compra de locales y edificios por parte del Arzobispado en la zona, donde en los últimos años se multiplican "las librerías católicas y pisos propiedad de la Iglesia", que no tiene otra finalidad, a juicio de los vecinos, que "adueñarse de todo el ámbito".
La arquitecta Ángela Souto ha criticado, por su parte, que el plan municipal carece de un estudio ambiental, paisajístico y arqueológico -está declarado Bien de Interés Cultural por los restos que alberga- y "altera un entorno que es una parte muy importante de la memoria histórica de la ciudad y se haya reflejado en todas las vistas de la misma, incluidas las famosas panorámicas de Goya".
Tanto IU como los colectivos presentes hoy en la jornada han pedido al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que "paralice" el plan porque "no cumple los requerimientos que impone la categoría del lugar" y que "garantice la conservación del recinto, tapias y entorno de la Cornisa".
Además, han recordado al alcalde que siendo presidente de la Comunidad de Madrid el mismo frenó la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para que este plan no fuese llevado a cabo.
El actual plan de reforma de la Cornisa nace de un acuerdo alcanzado en 2005 entre Ruiz-Gallardón y el arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, para cuya ejecución hubo que modificar el PGOU un año después.
El Arzobispado logra 25.000 metros cuadrados para edificar y el Ayuntamiento recupera para la ciudad suelo dotacional -que antes fue suyo y cedió a la Iglesia, según recuerdan los vecinos- para levantar una escuela infantil y un polideportivo.