En el Patio Las Camelas, la presidenta de la República, Michelle Bachelet, festejó esta tarde junto a la comunidad judía en Chile, el “Janucá, Fiesta de las luces”. “El encuentro en torno a esta ceremonia de alegría es ya un mensaje en sí mismo”, comentó.
“Aquí hay cabida para todos sin exclusión; y son y serán bienvenidos todos, porque este Palacio de la República es un patrimonio común y un símbolo del país diverso que somos y que debemos profundizar”, agregó la jefa de Estado.
Asimismo indicó que “como Presidenta y para mi Gobierno, el vínculo cotidiano y la relación respetuosa que cultivamos con todos los credos presentes en el país, y con las comunidades de fe que han hecho de Chile su patria, hacen de nuestro país, uno mejor, mucho mejor”.
En la misma línea, la Mandataria afirmó: “Porque cada comunidad y cada fe significan diversidad, significan tolerancia, en el sentido de aceptar la diversidad, dos valores que están en el corazón de nuestra acción”.
Refiriéndose a la reforma constitucional, puntualizó que “necesitamos un marco institucional para convivir civilizadamente, y entre las principales iniciativas legales que lo forman están aquellas que buscan proteger del odio y de la estigmatización del que es diferente, independiente de su edad, raza, origen, religión, procedencia o identidad de género”.
Prosiguiendo con la idea, puntualizó que “estos principios también deben presidir los debates venideros acerca de una nueva Constitución. Y estamos muy contentos de la disposición a contribuir de la Comunidad Judía, que manifestaron cuando hicimos una reunión con todos los credos religiosos, para invitarlos a ser parte de esta discusión”.
Al finalizar sostuvo que “estamos convencidos que en una Constitución moderna, la unidad y la igualdad sólo pueden fundarse en el reconocimiento de la diferencia. No se trata simplemente de un deseo, sino de un deber”.