El autor del atentado se radicalizó en los foros más oscuros de internet, difundió su manifiesto conspirativo y retransmitió en directo en Twitch el asesinato de 10 inocentes
Estaba todo planeado. El pasado sábado, 14 de mayo, Payton Gendron se enfundó en un traje militar, agarró su arma automática y se subió a su coche para dirigirse al Tops Friendly Market, un supermercado situado en un barrio predominantemente negro de Buffalo, en Estados Unidos. Antes, había activado la cámara conectada a su casco para retransmitir como disparaba y asesinaba a sangre fría a 10 personas. En su momento de máxima audiencia, el directo emitido por Twitch reunió a tan solo 22 espectadores. Seis días después, el vídeo de la matanza se ha propagado por los rincones más oscuros de internet, acumula millones de visualizaciones.
Este atentado terrorista pone de nuevo en relieve como el supremacismo blanco utiliza las redes sociales para amplificar su propaganda y captar así nuevos adeptos a su causa. Además de retransmitirla en directo como si fuese un videojuego, el presunto autor de la masacre –de tan solo 18 años— colgó un manifiesto racista de hasta 180 páginas con sus intenciones en foros en línea como Discord, 4chan o 8kun, estos dos últimos conocidos por albergar todo tipo de contenido, desde pornografía infantil a escabrosos asesinatos, y por ser la cuna del movimiento conspiranoico trumpista QAnon. “ESTÁ SUCEDIENDO: ESTO NO ES UN SIMULACRO”, escribió.