Ayer, en el Local de la Ribera de Granada, más de 40 personas participaron en la charla coloquio sobre los beneficios fiscales a las confesiones religiosas y sus exenciones en impuestos como el IBI o el ICIO.
Durante más de dos horas los asistentes siguieron los datos que exponía Manuel Navarro, coordinador de Andalucía Laica, y planteaban sus dudas y comentarios ante los casos concretos que iban apareciendo en la pantalla. El despropósito de que sigan vigentes las leyes y los Acuerdos que posibilitan este afán recaudador de la iglesia católica y los gobiernos que han mantenido y mantienen este irregular y anacrónico sistema de obtención de fondos por parte de las confesiones religiosas a cargo del erario público, las exenciones fiscales de inmuebles por ser propiedades de entidades religiosas, aunque se desarrollen actividades lucrativas, generalmente por empresas que alquilan los inmuebles religiosos y evitan el pago del IBI. O la usurpación de las propiedades de bienes históricos mediante el sistema de inmatriculaciones.
Finalmente se analizaron las razones que permiten ese provecho mutuo, en detrimento del interés general y que está llevando a la mercantilización de servicios públicos básicos (educación, sanidad, asistencia social,…) derivados hacia entidades religiosas que obtienen sus beneficios económicos y les permite mantener su ideología particular o facilitan su apostolado y evangelización, con la connivencia de los poderes públicos, responsables de este atropello.