El gurú Asaram Bapu, de 77 años, promueve entre sus millones de seguidores una vida basada en la compasión, la espiritualidad y la ausencia de deseos carnales, una filosofía de vida un tanto alejada de sus propias prácticas. Y es que este miércoles un tribunal de la ciudad india de Jodhpur le ha declarado culpable de haber violado a una adolescente de 16 años en un centro de meditación.
El gurú ha sido condenado a cadena perpetua.
Otros dos acusados han sido condenados a 20 años de prisión y otros dos han sido absueltos.
Los hechos se remontan a agosto de 2013, cuando una pareja envió a su hija a uno de los ‘ashrams’ que el conocido gurú tiene en la India. La idea era que la chica recibiese lecciones espirituales y fuese liberada de «poderes sobrenaturales fantasmales», porque se ve que en su interior habitaban espíritus malignos.
Una noche, Asaram hizo llamar a su discípula a su habitación con la excusa de llevar a cabo su curación, momento que aprovechó para violarla. Sus padres, mientras tanto, se encontraban fuera realizando las oraciones pertinentes para que la supuesta cura tuviese efecto, según dijo la policía.
La adolescente le contó a sus padres la agresión sexual, a pesar de que el gurú le había amenazado con guardar silencio, y fue entonces cuando decidieron poner una denuncia.
El gurú ha sido hallado culpable, «pero nada podrá compensar el trauma que han sufrido la víctima y su familia», dijo a la cadena india NDTV. En cualquier caso, se espera que el gurú recurra la sentencia.
No es un caso aislado
Asaram Bapu, de origen paquistaní, lleva desde la década de los 70 predicando ejercicios de meditación y valores espirituales. Según su web, en India y en el extranjero cuenta con 40 millones de seguidores, incluido el primer ministro, Narendra Modi, que ha asistido a sus eventos. Asaram tiene 400 ‘ashrams repartidos’ por el país y propiedades millonarias.
Además de este caso de violación, está siendo investigado por corrupción y tiene pendiente otro caso en Gujarat, donde está acusado de violar a una mujer hace unos 15 años.
Sus casos no están libres de polémicas. Al menos nueve testigos relacionados con esos procesos han sido atacados y tres de ellos han aparecido muertos. Las familias de las víctimas denunciantes aseguran que han recibido amenazas, de modo que la policía investiga si el gurú y sus devotos están detrás de todos estos episodios.
Hoy se ha reforzado la seguridad en los estados donde la organización de Asaram tiene más presencia (Rajastán, Gujarat y Haryana), ya que miles de seguidores del gurú han anunciado que celebrarán manifestaciones en defensa de su líder espiritual.
La preocupación de las autoridades tiene un precedente: la condena el pasado verano al gurú Gurmeet Ram Rahim, sentenciado a 20 años de prisión por violar a dos de sus discípulas. Aquel veredicto provocó violentas protestas de sus fieles que acabaron con más de 30 muertos. Esta vez el ministerio del Interior ha ordenado a las autoridades de los citados tres estados que desplieguen más efectivos policiales para evitar que se repita ese escenario.
