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Fuentes del partido dicen que el Vaticano tendría que estar más atento a las repercusiones, sobre todo en campaña electoral
La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, le ha cogido gusto a ir a ver al Papa Francisco. Aunque vaya no tanto como vicepresidenta del Gobierno de España sino como líder de Sumar, la amalgama de formaciones de izquierda que ahora aborrece Podemos.
Coincidencias con el Papa
Muestra de ello son las ganas que Yolanda Díaz tenía de hacer pública su próxima cita con el Papa en el Vaticano. Será el próximo día 2 de febrero. En un programa de televisión aprovechó la oportunidad para dar la noticia y añadir que “tengo una magnífica relación con el Papa Francisco y tengo ciertas coincidencias con él, sobre todo en la lectura que hace de la emergencia climática o, por ejemplo, la lectura que hace de la paz en el mundo, o también la defensa del derecho al trabajo digno”, abundó Yolanda Díaz.
Lo que ocurre es que ése día comienza la campaña de las elecciones gallegas. Unos comicios en los que la líder de Sumar está lógicamente implicada.
Las reacciones del PP
Esta nefasta coincidencia ha hecho que, en el PP, tal y como ha podido saber Religión Confidencial, no haya sentado bien que el papa Francisco reciba en esa fecha a la política gallega.
Fuentes del partido ganador de las últimas elecciones apuntan que “el Papa puede recibir a quien quiera y cuando quiera, pero el Vaticano tendría que estar más atento a las repercusiones de las entrevistas en los países, sobre todo si estamos en campaña electoral”.
El PP, según las fuentes dentro del partido, ha hecho llegar de forma diplomática su malestar a la Conferencia Episcopal Española. Otra cuestión, comentan fuentes críticas con la actual dirección del PP dentro del partido en esta materia, es si Alberto Núñez Feijóo ha pedido ya una visita al Papa.
La Santa Sede, por otra parte, repite a este respecto una idea que es cierta. El Papa Francisco, dentro de sus posibilidades, recibe a todo el que le solicita una entrevista tal y como se puede ver en la agenda pública y en la privada.
La reunión de 2021
Yolanda Díaz ya se reunió con el Papa Francisco el 11 de diciembre de 2021. Una entrevista de unos cuarenta minutos de la que el Papa, según ha comentado a periodistas españoles, guarda un buen recuerdo por la excelente impresión que le causó Yolanda Díaz, de quien se deshace en elogios. No parece que ocurra así con el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Son, por otra parte, muchos los vínculos de amistades comunes del Papa con Yolanda Díaz, localizados principalmente en Madrid en los entornos tanto eclesiales como de los cristianos que militan en formaciones de izquierda. Un ejemplo es el de Manuela Carmena, una de las referentes de “integridad en la política” según dicen ha confesado en privado el papa Francisco en varias ocasiones.
Los temas de Yolanda Díaz
La noticia ha pillado por sorpresa a los obispos españoles que tampoco están al día de la agenda de las visitas que recibe el Papa. A los obispos, que no tiene por qué al presidente de la Conferencia Episcopal Española, que mantiene una conexión permanente con el círculo íntimo del Papa.
Otra cuestión es la agenda de los temas que Yolanda Díaz va a poner encima de la mesa del Pontífice. La agenda social del Gobierno, que se atribuirá la vicepresidenta de Sumar, pasa por cuestiones como la política de migraciones, las ayudas sociales a los más vulnerables, la política verde, el control del capitalismo especulativo y financiero, la defensa del derecho de los trabajadores, el aumento del ingreso mínimo vital y del salario mínimo, la defensa de la mujer y la lucha contra la pederastia.
Cuestiones ideológicas
No es previsible que Yolanda Díaz le pida criterio al Papa sobre cuestiones como la ideología del género, el aborto, los problemas demográficos, la libertad de educación en España, sobre el respeto a las instituciones del Estado, a la separación de poderes, incluso sobre fenómenos como el nacionalismo excluyente.
No hay que olvidar que, en las relaciones entre el Gobierno y la Iglesia, está aún pendiente de resolver el asunto de la Obra Pía. Un conflicto que no está en manos de la vicepresidenta primera sino del ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños.
Fuentes de la Conferencia Episcopal Española apuntan a que el Gobierno está a un paso de constituir una Comisión de Investigación, en el Congreso, sobre la pederastia en la Iglesia, tal y como ya se está haciendo en el Parlamento de Cataluña.
Como es lógico, la Nunciatura en España guarda un diplomático y sigiloso silencio sobre esta visita.
