El ritual fue encabezado por el arzobispo Juan Sandoval Íñiguez, un demonólogo español y otros nueve exorcistas mexicanos
Un grupo de arzobispos católicos de diversas partes de México, junto a un demonólogo español, realizaron en el estado de San Luis Potosí un “magno exorcismo” para “suplicar a Dios” que el mal y la violencia salgan del país.
El arzobispo emérito de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, dio a conocer que el exorcismo fue realizado a puertas cerradas y en secreto el pasado 20 de mayo en la catedral del estado de San Luis Potosí.
Según el religioso, este sería el primer exorcismo en el mundo enfocado a “expulsar al maligno” de toda una nación y no a una persona en particular. Según la creencia de los sacerdotes, el mal “entró a México” después de que fuera aprobada la despenalización del aborto en la Ciudad de México.
“La puerta que se le abrió al demonio en México es la legalización del aborto”, afirmó el obispo emérito para quien este hecho constituye “una falta inmensa porque legaliza los homicidios”.
Comparó a las víctimas que son asesinadas por miembros de los carteles del narcotráfico con los niños que son “despedazados dentro del vientre de su madre”.
Sandoval Íñiguez es conocido por su férrea oposición a los matrimonios entre personas del mismo sexo y al aborto.
El sacerdote calificó de “una aberración inmensa” la reciente decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de declarar inconstitucionales las legislaciones estatales que limitan el matrimonio a la unión entre hombre y mujer.
En San Luis Potosí, donde se realizó el exorcismo, tres curas han estado envueltos en un caso de corrupción de menores desde el pasado año.
Eduardo Córdova, uno de los religiosos acusados de pederastia, huyó tras ser acusado de violar a un centenar de niños en las últimas décadas.
Sandoval Íñiguez no descartó que se hagan otros “magnos exorcismos” en otros estados de México durante los próximos meses.