Es uno de los prelados más relevantes de Argentina y, curiosamente, protagonista indirecto de muchos escándalos que ha padecido la Iglesia de este país. Ahora, uno de ellos le salpica directamente. Tal y como informa El Tribuno, una religiosa ha denunciado al arzobispo de Salta, Mario Cagnello, y a otros dos sacerdotes por violencia económica, psicológica y física.
La religiosa, que pertenece a la congregación de las carmelitas descalzas. Por el momento la Iglesia no se ha pronunciado y los denunciados siguen al frente de sus funciones. El hecho de violencia habría quedado filmado en el teléfono móvil de una de las monjas, pero por el momento no ha trascendido.
Por lo que ha podido saber RD, no es la única acusación a la que presumiblemente tendrá que enfrentarse el prelado. Parece ser que existe otra querella en marcha por injurias y calumnias por haber despedido a un profesor de teología con una falsa acusación de abusos, y es muy probable que acabe debiendo responder por ello, al depender de él el nombramiento y el cese de dicho encargo académico en calidad de gran canciller. Y no sería extraño que sucediera lo mismo con algunas otras, interpuestas por otros sacerdotes acusados que, finalmente, fueron absueltos por la justicia civil.
La denuncia indica que tres monjas fueron víctimas de violencia de género en el convento San Bernarlo y la causa quedó en manos del Juzgado de Violencia Familiar y de Género 3. La Justicia ordenó una prohibición de acercamiento de los sacerdotes. La denuncia existe y que la resolución ya habría sido notificada. El caso se encuentra en el Juzgado de Violencia Familiar y de Género 3, cuya titular es María Carolina Cáceres Moreno.