“Hoy Barquisimeto dio el ejemplo vivo de hermandad para nuestro pueblo (…) En esta celebración religiosa no hubo distinción ni discriminación en cuanto a las clases sociales o participaciones en partidos políticos. Aquí estamos todos al lado de la Divina Pastora, que es lo más importante”.
Así lo dijo el alcalde del municipio Iribarren, Alfredo Ramos, durante la visita 161 de la Divina Pastora a Barquisimeto, siendo esta la tercera manifestación más grande del mundo y la segunda en Latinoamérica, donde más de tres millones de personas desbordaron las calles de la ciudad en su muestra de fe y devoción a la Virgen.
“Le pedimos a la Divina Pastora por la reconciliación de los venezolanos, por la paz y el cambio profundo que necesitamos para recuperar a nuestro país (…) El pueblo está pasando hambre y hoy más que nunca ratificamos nuestra posición y lucharemos por los grandes cambios que se acercan”, expresó el gerente local.
El burgomaestre apuntó que “llegó la hora” de comprometerse por el futuro de la juventud en el país. “Te pedimos excelsa patrona por el porvenir de nuestros hijos (…) Barquisimeto y la Divina Pastora están unidos por la reconstrucción de nuestro país en paz y armonía”, dijo.
Ramos pidió hacer de la Divina Pastora “la guía espiritual” para impulsar los cambios necesarios “que nos devuelvan la paz y la luz frente al oscurantismo en el que nos ha puesto este Gobierno. En toda esta oscuridad le pedimos que nos dé luz”, manifestó.
Durante la ceremonia religiosa se recordaron hechos de fe que hicieron que el fervor por la virgen creciera, tal como el terremoto que ocurrió en el poblado de Santa Rosa, el cual destruyó la capilla pero la imagen de la Virgen quedó a salvo.
En otro orden, Ramos lamentó que el Gobierno “esté dando la espalda al pueblo” con las erradas medidas políticas tomadas “afectando directamente el bolsillo de los venezolanos”, alegando que es necesario un cambio del modelo implementado por Nicolás Maduro.
“Para que exista un cambio económico en el país urge de un cambio de Presidente (…) Uno ve la gente pasando hambre e incluso comiendo de la basura, sin poder encontrar medicamentos porque no hay (…) Acompañemos a los más humildes y pobres como lo hizo el señor Jesucristo y así lograremos de Venezuela un mejor país”, indicó.