Un estudio censa por primera vez los templos no católicos de Catalunya Iglesias evangélicas, testigos de Jehová e Islam son las confesiones con más lugares de culto
La realidad religiosa en Catalunya es muy diversa y en constante cambio, en gran parte debido a los recientes flujos migratorios, según muestra Les altres religions, el primer estudio riguroso y exhaustivo sobre centros de culto no católico. El censo, que llegará a las librerías en formato resumido, es obra de un equipo de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) bajo la dirección del sociólogo Joan Estruch. Lo presentó ayer oficialmente el conseller en cap, Josep Bargalló.
A >> Pequeños pisos, rápidos traslados
Joan Estruch, Joan Gómez, Maria del Mar Griera y Agustí Iglesias, todos de la UAB, iniciaron la recopilación de datos en el 2001. Visitaron centenares de centros y mantuvieron infinidad de entrevistas. Entre los lugares de culto no católico, 722 en total, se cuentan templos de gran capacidad, pero también pisos pequeños en inmuebles desangelados, oscuros y con problemas de insonorización.
"Es posible que nos falte alguno. Puede que no los hayamos encontrado o puede que no hayan querido ser encontrados, pero creo realmente que serán pocos", resume Estruch. El problema, precisa, es que muchas pequeñas comunidades florecen como hongos, se trasladan o desaparecen.
B >> La inmigración y las nuevas tendencias
Aunque los creyentes de ciertas creencias orientales –budismo y bahaísmo– son esencialmente catalanes conversos, la inmigración es el principal motivo de la nueva diversidad religiosa. El sociólogo de la UAB explica, por ejemplo, que el judaísmo es atribuible a la inmigración argentina o que las prácticas sijs son un fruto de la inmigración india. Algunas iglesias evangélicas cuentan con gran tradición en Catalunya, pero otras han nacido al amparo de las comunidades suramericanas y asiáticas. El islam es la religión dominante entre magrebís y paquistanís, pero también de buena parte de los subsaharianos. Y las iglesias ortodoxas son un resultado de la inmigración de Europa oriental.
El número de iglesias en Catalunya ha aumentado en los últimos años, mientras que la sociedad catalana en general tiende a la secularización y "se está emancipando de las antiguas tradiciones (católicas) que impregnaban todos los ámbitos de la vida", subraya el informe.
C >> Una docena de grandes divisiones religiosas
El estudio ha censado y agrupado los centros de culto en 12 grandes divisiones: judaísmo (dominan los sefardís), iglesias ortodoxas, iglesias evangélicas de todo tipo (baptistas, anglicanos, metodistas, presbiterianos), testigos de Jehová, Iglesia adventista, mormones, islam (mayoría suní), fe bahaí, hinduismo, sijismo, budismo y taoísmo. Los lugares de culto se concentran lógicamente en las comarcas más pobladas y con mayor inmigración (Barcelonés, Maresme, Vallès Oriental y Occidental y Baix Llobregat), mientras que no hay ni uno en el Pallars Sobirà, la Alta Ribagorça y el Priorat. Las tres tradiciones religiosas con más centros son las iglesias evangélicas o protestantes (341), los testigos de Jehová (141) y el Islam (139).
D >> Centros de asimilación y promoción social
La directora general de Asuntos Religiosos de la Generalitat, Montserrat Coll, dijo que conocer la ubicación de los centros religiosos –que también son a menudo centros de reunión social entre inmigrantes–, así como mantener relación con sus dirigentes, "será muy útil para incorporar a los recién llegados y promocionar los derechos humanos y la igualdad de género". Coll también dijo que el Gobierno catalán pretende "garantizar la asistencia religiosa de opciones minoritarias en prisiones y hospitales" porque "todos los grupos deben ser válidos al margen del número de creyentes". Estruch concluyó que la plena normalización llegará "cuando estas religiones, recordando la obra de Paco Candel, dejen de ser consideradas las otras religiones de Catalunya".