La organización Europa Laica denunció hoy que las Fuerzas Armadas "difícilmente pueden garantizar la defensa" de la Constitución con la celebración de "actos religiosos o la participación activa en los mismos", por lo que exigió al Gobierno que elimine de esta institución "todas las ceremonias y símbolos confesionales para respetar así el principio de la aconfesionalidad del Estado".
Así lo defendió la organización después de que el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, anunciara esta mañana que la ministra de Defensa, Carme Chacón, se ha comprometido a dejar que los cadetes de la Academia de Infantería de Toledo lleven el sable y presenten armas al Santísimo durante la celebración mañana de la procesión del Corpus Christi en Toledo.
Para Europa Laica, es necesario que las Fuerzas Armadas y otros cuerpos de seguridad del Estado tengan un reglamento ceremonial y de protocolo –por el que se rigen los funerales de Estado, las conmemoraciones y otros actos militares– que sea "estrictamente laico", por lo que instó a la supresión de "órganos y servicios confesionales" dentro de la propia estructura de la institución.
Europa Laica considera "preocupante" que el Gobierno, en pleno debate del proyecto de Ley de Derechos y Deberes de los Militares, presente la aconfesionalidad como un "avance", pero conserve "una buena cantidad de ceremonias, ritos y oficios de carácter netamente confesionales".
Así pues, calificó de "inadmisible" que exista "un Arzobispado castrense, con catedral propia y un extenso plantel de capellanes castrenses, dependientes económica y orgánicamente del Ministerio de Defensa". "Los Presupuestos Generales del Estado y los fondos públicos de y para toda la ciudadanía no deben financiar instituciones religiosas y confesionales", afirmó.
Esta organización demandó también que la futura Ley de Derechos y Deberes de los Militares impida la asistencia, con carácter oficial, de miembros de las Fuerzas Armadas a "procesiones y otros actos católicos o de cualquier otra confesión religiosa, pues supone una grave vulneración del principio constitucional de aconfesionalidad del Estado".
Por último, criticó que el Ministerio de Defensa aduzca como justificación al mantenimiento de las actuales estructuras, ceremonias y servicios religiosos la cercanía de la profesión militar al riesgo de morir. Para Europa Laica, "asociar muerte y religión es respetable en el ámbito privado, como opción estrictamente personal de cada individuo, pero no en el caso de los responsables y dirigentes del Ministerio de Defensa, en calidad de tales".