El ministro galo del Interior, Manuel Valls, aseguró que el Gobierno no vacilará en expulsar a los que, «bajo el nombre del Islam, no respeten las leyes y valores» del país europeo.
El Gobierno de Francia se ha puesto en alerta y ha intensificado las medidas de seguridad a fin de evitar protestas contra actos antislámicos.
En este contexto, el Gobierno francés advirtió el jueves que expulsará a cualquier musulmán que socave la seguridad y ponga en peligro el orden público en Francia.
El ministro galo del Interior, Manuel Valls, aseguró que el Gobierno no vacilará en expulsar a los que, "bajo el nombre del Islam, no respeten las leyes y valores" del país europeo.
Las declaraciones del titular francés fueron pronunciadas después de que el semanario galo Charlie Hebdo publicara el pasado 19 de septiembre una serie de caricaturas que satirizan la figura del gran profeta del Islam, Hazrat Mohamad (P).
La semana pasada, en Francia, hubo numerosas convocatorias de manifestación el sábado, tras la publicación de las caricaturas, las cuales fueron prohibidas por el Gobierno de París que desplegó un importante dispositivo policial preventivo en las calles.
Esta profanación ocurrió poco después de que la emisión de una película antislámica realizada en EE.UU., provocara el enojo del mundo musulmán en varios países y regiones como: Irán, Turquía, Sudán, Egipto, Yemen, Túnez, Bangladesh, Indonesia, Malasia, Cachemira, Paquistán, Afganistán, India, Irak, Gaza, Marruecos, Siria, Kuwait, Nigeria, Kenia, Australia, Reino Unido, EE.UU., Francia, Bélgica, entre otros.
El pasado 16 de septiembre, Valls anunció la prohibición de cualquier protesta callejera contra el largometraje producido por el cineasta israelí-estadounidense de nombre Nakoula Basseley Nakoula, conocido anteriormente como Sam Bacile.