Tras siete años de estudio, una investigación independiente sobre el abuso sexual infantil en Inglaterra y Gales en distintos sectores de la sociedad británica, que incluye no solo a las iglesias católicas y anglicanas, sino a todas las instituciones gubernamentales, escuelas y centro sanitarios, concluye como una «epidemia nacional» de abusos a menores.
Este Panel de la Investigación Independiente sobre el Abuso Sexual Infantil (IICSA) publicó el jueves su informe final que comenzó en julio de 2014, anunciada por la ministra del Interior británica, Theresa May. En febrero de 2015, la IICSA se constituyó como una investigación estatutaria, lo que le otorgó amplios poderes legales de citación y acceso a información clasificada.
La investigación examinó el modo en que las instituciones del país cumplían con su deber de proteger a los niños de los abusos sexuales, recoge Vatican News.
En el informe final, la IICSA lamentó que los abusos a menores sean una epidemia nacional y estimó que 1 de cada 6 niñas y 1 de cada 20 niños sufren abusos sexuales antes de los 16 años.
El informe señala que tanto las instituciones como los políticos han antepuesto su reputación al bienestar de los niños y han encubierto los casos de abuso durante décadas. También señalaba que muchas instituciones aún no han aplicado medidas de protección adecuadas.
En declaraciones a los periodistas para anunciar el informe, el presidente de la IICSA, Alexis Jay, dijo que la magnitud de los abusos descubiertos por la investigación era «espeluznante y profundamente inquietante».
«Esto no es sólo una aberración histórica que ocurrió hace décadas, es un problema cada vez mayor y una epidemia nacional», dijo.
Tras su publicación, el Consejo Católico emitió una declaración en la que acogía el informe final de la IICSA y destacaba su intención de estudiar el contenido y las recomendaciones del informe.
El Consejo Católico -creado por la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales para cumplir con la investigación- también ofreció garantías de que la Iglesia seguirá tratando de proteger a los vulnerables.
La Iglesia encargó su propia revisión independiente antes de la publicación del informe del estudio de caso de la IICSA sobre el trabajo de salvaguardia de la Iglesia, que se publicó en noviembre de 2020.