La guía del Dicasterio para la Doctrina de la Fe que explica a los obispos y superiores generales cómo actuar frente a la pederastia eclesial se moderniza para incluir los cambios canónicos de los últimos dos años
Dos años después de la publicación de su primera edición, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe actualizó este lunes el vademécum para que las diócesis y a las congregaciones religiosas sepan cómo actuar en los casos de abusos sexuales a menores cometidos por eclesiásticos. Esta guía, que explica a los obispos y a los superiores generales cuales son los pasos que tienen que dar desde el punto de vista canónico, incluye en su nueva versión los cambios que han entrado en vigor en los últimos dos años en el tratamiento de esta lacra.
Entre ellos destaca los que ha supuesto la entrada en vigor el pasado diciembre del nuevo Libro VI del Código de Derecho Canónico, que se encarga de los crímenes y penas cometidos dentro de la comunidad católica, entre ellos la pederastia eclesial. Con su nueva versión, los abusos sexuales cometidos por eclesiásticos se consideran un delito “contra la dignidad de la persona, la libertad y la vida” y se acaba con la manga ancha con la que contaban hasta entonces los obispos y superiores generales a la hora de tratarlos. El volumen redujo el margen de discrecionalidad y advirtió de los delitos que cometen si no actuaban en consecuencia.
“Abierto” a nuevas actualizaciones
La actualización del vademécum también incluye los cambios recogidos en los motu proprio ‘Fidem servare’ y ‘Competentias quasdam decernere’, publicados el pasado mes de febrero y con las que se cambió la organización interna del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, de manera que tenga dos secciones separadas, una doctrinal y otra disciplinaria, reconociendo así una realidad que ya existía en la práctica. Finalmente, el nuevo documento tiene en cuanta la reorganización de la Curia romana establecida por el papa Francisco con la nueva Constitución Apostólica ‘Praedicate Evangelium’, que entró en vigor el pasado 5 de junio.
Según informó el Vaticano en una nota, la revisión del vademécum del Dicasterio para la Doctrina de la Fe ha tenido en cuenta, entre otras fuentes, “las diversas aportaciones provenientes de los centros académicos y de los estudios sectoriales” recibidos en los últimos dos años. También se han incluido las reflexiones derivadas del “constante diálogo” con las realidades eclesiales que trabajan en este ámbito, cuyas “valiosas aportaciones” han permitido “aclarar y mejorar” el texto. Finalmente el Dicasterio manifiesta su voluntad de seguir recibiendo comentarios al vademécum, que está “abierto” a ulteriores mejores en el curso de los años.