Este viernes la proposición de ley ha sido registrada en el Parlamento autonómico, con lo que se espera que antes del verano pueda ser aprobada.
Navarra será la primera comunidad en promulgar una ley que reconozca a las víctimas de abusos en la Iglesia católica, esclarecer los delitos cometidos por los miembros de esta institución en la región y «contribuir a una memoria colectiva, democrática y crítica» sobre el problema. Este viernes la proposición de ley ha sido registrada en el Parlamento autonómico, con lo que se espera que antes del verano pueda ser aprobada.
En el borrador de la norma, al que ha tenido acceso El País, se contempla la creación de una «comisión de reconocimiento» de expertos que valoren, durante seis años de trabajo, las solicitudes de las personas que afirmen haber sufrido abusos por parte de la Iglesia y quieran ser beneficiarios de la ley.
Este documento incide en que el objetivo de la norma será «documentar con el máximo rigor, veracidad y coherencia» los casos, «promover un reconocimiento institucional y social de las víctimas, favoreciendo su visibilidad y su satisfacción personal», así como llevar a cabo estos trabajos con la mayor celeridad posible para evitar «trámites formales que alarguen o dificulten innecesariamente» el proceso. Además, el texto añade que «la declaración del afectado implicará el derecho al reconocimiento público de la condición de víctima. Ese reconocimiento público deberá compaginarse con el derecho de la víctima, cuando lo solicite expresamente, a preservar su intimidad».
Esta ley considerará por primera vez como víctimas a los afectados, ya que en la mayor parte de los casos no se les ha reconocido jurídicamente de este modo, dado que el delito ha prescrito. No obstante, únicamente se contemplan en esta norma los delitos cometidos en Navarra.
