Miembros del colectivo, disfrazados de Reyes Magos y Olentzero, han protestado ante el Arzobispado por entender que la Iglesia Navarra acumula más de 1.000 inmatriculaciones de edificios y bienes que la plataforma reivindica como populares
Miembros de la Plataforma para la Defensa del Patrimonio Navarro, disfrazados de Reyes Magos y Olentzero, han dejado carbón este lunes ante la puerta del Arzobispado de Pamplona por entender que la Iglesia Navarra "se ha portado mal" al acumular más de 1.000 inmatriculaciones de edificios y otros bienes que el colectivo reivindica como populares.
El acto simbólico, al que por segundo año consecutivo han acudido unas 200 personas convocadas por este colectivo, ha terminado con el canto de varios villancicos populares con la letra arreglada para la ocasión, alusiva a los atrios, ermitas, cementerios, casas parroquiales y otros bienes que fueron construidos y durante siglos mantenidos por los ayuntamientos navarros.
Al no haber sido oficialmente inscritos en el registro de la propiedad y ser de uso principalmente religioso, el Arzobispado navarro inició hace años la inmatriculación en su beneficio, una práctica que motivó el nacimiento de la Plataforma para la Defensa del Patrimonio Navarro que desde hace años pide la "devolución" de estos bienes, que superan el millar.
En tono festivo, no exento de la reivindicación en las letras de los villancicos, han intervenido también Olentzero en euskera y Melchor en castellano, quienes junto a Gaspar y Baltasar han sostenido una pancarta con el lema "Mientras haya apropiación, os traeremos carbón. Herriarena herriarentzat, ikatza gaiztoentzat" ("Los del pueblo para el pueblo, carbón para los malos").
Ambos han recordado que los bienes inmatriculados "con tan obscena avaricia que deben ser restituidos a los pueblos", fueron levantados y mantenidos en pie "gracias a la solidaridad vecinal" y a ella debe ser devuelta su titularidad.
"El arzobispado de Navarra no se ha portado bien. Ha merecido que le traigamos carbón. Le instamos a que devuelva las cosas a los pueblos, que las deje en su estado anterior y acuerde con cada pueblo su uso adecuado. Mientras no sea así, seguiremos trayendo carbón", ha zanjado Melchor en la parodia.