Barack Obama ha pronunciado el único discurso político en el décimo aniversario del 11-S. “Nada puede torcer la voluntad de unos EEUU verdaderamente unidos”, ha afirmado.
El único discurso político ha tenido lugar por parte de Obama en el último acto en homenaje a las víctimas de los atentados del 11-S, el llamado 'Concierto de la Esperanza'. Al comienzo del acto, Obama indicó que los acontecimientos de los últimos diez años "subrayan los lazos entre todos los estadounidenses. No hemos sucumbido a la sospecha y la desconfianza". El gobernante, que hoy recorrió los tres escenarios de aquellos atentados que costaron la vida a cerca de 3.000 personas hace diez años, repasó lo que ha cambiado en esta década y lo que permanece del carácter estadounidense. "No somos perfectos, pero nuestra democracia es duradera, y esa democracia… también nos da la oportunidad de perfeccionar nuestra unión".
Ahora "nos aferramos a nuestras libertades. Somos más vigilantes contra quienes nos amenazan, y hay inconvenientes que vienen aparejados a nuestra defensa común", declaró, en un discurso de cerca de 15 minutos. "Los debates, sobre la guerra y la paz, sobre seguridad y las libertades civiles, a menudo han sido encendidos. Pero es precisamente el rigor de esos debates, y nuestra capacidad de resolverlos de manera que honra nuestros valores, lo que representa una medida de nuestra fuerza", agregó. Esto, subrayó, "es lo que honramos en días de conmemoración nacional, esos aspectos de la experiencia estadounidense que perduran, y la determinación de avanzar como un pueblo".
Obama también repitió lo que ya había asegurado entonces su predecesor, George W Bush, y que ha sido una máxima de su mandato: "Estados Unidos nunca estará en guerra contra el Islam ni contra ninguna otra religión". Y concluyó su alocución como había comenzado la jornada, en la que sus únicas otras palabras en público fueron una cita bíblica, el Salmo 46, en la ceremonia de homenaje en la "Zona Cero" en Nueva York. "El llanto puede durar una noche, pero la alegría llega en la mañana", recitó.
Jornada de conmemoración
Antes de eso, Barack y Michelle Obama han acudido al Pentágono para hacer una ofrenda floral en honor a las víctimas que allí perdieron la vida aquel 11 de septiembre. Por Shanksville, Pennsylvania, también han pasado el Presidente y la Primera Dama. Han honrado a los pasajeros y a la tripulación del Vuelo 93. Para muchos, convertidos en héroes al impedir que los terroristas estrellaran otro avión contra un nuevo objetivo. El nombre de cada uno de ellos está grabado en un monumento. En total, 184 bancos dedicados a su memoria.
Seguramente el momento más emotivo se ha vivía a primera hora de la jornada. Una campana sonaba a las 8.46h de la mañana a la misma hora a la que impactó el primer avión contra la torre norte.
Emotivo minuto de silencio. Justo después el Presidente Obama ha leído el salmo 46 de la Biblia. El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, ha recurrido a una cita de Shakespeare, que ha dado paso al nombramiento de las 2.977 personas asesinadas en los atentados terroristas. A las 9:01, momento exacto en el que el segundo avión colisionaba con la torre sur, el silencio se ha vuelto a apoderar de la Gran Manzana. A partir de hoy, los monumentos de la Zona Cero se abren al público para todos aquellos que quieran visitarlos.