Este 12 de diciembre los mexicanos celebran el Día de la Virgen de Guadalupe, una fecha en que millones de peregrinos del país y el extranjero se movilizan hasta la Basílica de Santa María de Guadalupe para orarle a la “morenita” mexicana. En 2017, se rompió el récord de personas que la visitaron, con más de 7,2 millones de peregrinos. Pero no es un fenómeno exclusivo de México: en distintos países de la región hay adoración a vírgenes con diferentes orígenes y tradiciones. Estas son las 20 patronas de los países latinoamericanos.
Argentina – Nuestra Señora de Luján
Su devoción se remonta a 1630, cuando Antonio Farías de Sá, un hacendado portugués que vivía en Córdoba del Tucumán, encargó de Brasil una imagen de la Virgen María. En el camino, los bueyes de la carreta en que viajaba dejaron de andar a orillas del río Luján, señalando el lugar donde la figura quería quedarse para ser adorada.
Los católicos argentinos la celebran todos los 8 de mayo.
El Papa León XIII coronó la imagen en 1887.
Bolivia – Nuestra Señora de Copacabana
Se dice que en 1583, un sacerdote de un pueblo llamado Copacabana, a orillas del lago Titicaca, llevó una figura de la Virgen María hecha por un indio que había aprendido escultura en La Paz.
Fue coronada durante el pontificado de Pío XI.
Los bolivianos que la veneran, la celebran todos los 5 de agosto.
Brasil – Nuestra Señora Aparecida
La historia cuenta que un pescador encontró una imagen de la Virgen María al lanzar sus aparejos de pesca en un río en el estado de Sao Paulo en 1743, y luego de ello sus compañeros tuvieron una gran faena de pesca.
En Brasil la celebran todos los 12 de octubre.
El papa Pío XII la nombró patrona de Brasil en 1930.
Colombia – Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá
La historia cuenta que en 1560 Antonio de Santana, encomendero de los pueblos de Suta y Chiquinquirá, le pidió una imagen de la Virgen del Rosario al español Alonso de Narváez. La imagen fue puesta en un capilla con techo de paja, y ya en 1578 estaba muy deteriorada. Por ello, un párroco lo envió a una finca en Chiquinquirá, donde ante los rezos de una empleada doméstica, un día el lienzo deteriorado por el paso de los años recuperó el color de manera misteriosa en 1586.
El Papa Pío VII la proclamó patrona de Colombia en 1829.
Su día en Colombia es el 9 de julio.
Costa Rica – Nuestra Señora de los Ángeles
Dice la historia que en 1635, una india encontró una figura de la Virgen María en el monte y decidió llevarla para su casa. Al día siguiente, la imagen desapareció y fue encontrada de nuevo en el monte. Esto ocurrió en varias ocasiones, incluso le sucedió a un sacerdote, hasta que decidieron construirle un templo en el lugar al que siempre regresaba.
Fue declarada patrona de Costa Rica por el Congreso de la República en 1824, y ratificada en 1924 y 2002.
Su día de celebración es el 2 de agosto.
Cuba – Nuestra Señora de la Caridad del Cobre
El origen de su devoción se remonta a 1628, cuando dos indígenas que estaban en el mar en busca de sal encontraron una imagen de la Virgen María sobre una tabla, en la que decía “yo soy la Virgen de la Caridad».
El Papa Benedicto XV la proclamó patrona de cuba el 10 de mayo de 1916.
En Cuba celebran a la virgen 8 de septiembre.
Chile – Nuestra Señora del Carmen de Maipú
El culto por la Virgen del Carmen viene de los ermitaños que vivían en cuevas en el Monte Carmelo, en Israel, en los siglos III y IV. Su popularidad creció por toda Europa y llegó a Chile de primera mano por Pedro de Valdivia, conquistador español y fundador de la ciudad de Santiago, que le dedicó el primer templo en la ciudad el 20 de enero de 1540. Luego, esta virgen fue de especial devoción de las tropas independentistas chilenas.
El Papa Pío XI le proclamó patrona de Chile el 24 de octubre de 1923.
En Chile la celebran todos los 16 de julio.
Ecuador – Nuestra Señora de la Presentación de Quinche
Se dice que alrededor de 1585 la tribu de indios Oyacachis contrató la creación de una imagen de la Virgen María para su veneración, que al poco tiempo empezó a concederles milagros.
El Papa Pío XII la proclamó patrona de Ecuador el 20 de junio de 1943.
En Ecuador la celebran todos los 21 de noviembre.
El Salvador – Nuestra Señora de la Paz
Cuenta la historia que en 1682, unos mercaderes encontraron en una playa una caja, que decidieron llevar a la ciudad de San Miguel, en El Salvador, en el lomo de una burra que, al llegar a la plaza central del pueblo, se echó al suelo y decidió no caminar más. Allí, los hombres abrieron la caja y encontraron la figura de una Virgen sosteniendo a Jesús. Se dice que ese suceso hizo que terminara una guerra fratricida que se llevaba a cabo por esos días.
El Papa Pablo VI la proclamó patrona de El Salvador el 10 de octubre de 1966.
Los salvadoreños católicos la celebran todos los 21 de noviembre.
Guatemala – Nuestra Señora del Rosario
Su culto proviene de Europa y llegó a Antigua Guatemala de la mano de los dominicos, que fundaron la primera cofradía del Rosario en 1559 por orden de Francisco Marroquín, primer obispo consagrado de América, que buscó que con la construcción de un templo en la ciudad se extendiera la devoción por la Virgen del Rosario.
El papa Pío XI autorizó su proclamación como patrona de Guatemala el 28 de enero de 1934.
Los guatemaltecos católicos la celebran todos los 7 de octubre.
Honduras – Nuestra Señora de Suyapa
En 1747, unos indios que venían por un camino en la noche decidieron detenerse a descansar. Allí, el jefe del grupo encontró un objeto pesado en el suelo, que al desenterrarlo descubrió que se trataba de una figura de la virgen. Al día siguiente la llevaron a la aldea de Suyapa, donde empezaron a adorarla y a recibir sus milagros.
En Honduras la celebran todos los 3 de febrero.
Pío XII la proclamó patrona de Honduras en 1925.
México – Nuestra Señora de Guadalupe
La historia cuenta que al indio Juan Diego se le apareció la Virgen María pidiéndole que le dijera al obispo que le construyera un templo. El religioso le dijo al indio que necesitaba una señal, que terminó por ser la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe grabada en la tilma –un tipo de prenda exterior usado por hombres– de Juan Diego.
Pio X la proclamó patrona de toda América Latina.
En México la celebran todos los 12 de diciembre.
Nicaragua – Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción de «El Viejo»
La historia cuenta que en 1562, el teniente de gobernador y alcalde Lorenzo de Cepeda y Ahumada tuvo que protegerse de una tormenta en un puerto de Nicaragua. Con él, llevaba una figura de una virgen que llamó mucho la atención de los pobladores de la zona, quienes querían que, al partir, les dejara la figura. Pero no fue así, Lorenzo de Cepeda y Ahumada volvió a embarcarse y una nueva tormenta lo hizo regresar a tierra, junto a la imagen, que terminó por dejar para ser adorada por los pobladores.
La Confederación Episcopal de Nicaragua (CEN) la proclamó patrona del país el 13 de Mayo del 2001.
Los nicaragüenses la celebran todos los 8 de diciembre.
Panamá – Santa María La Antigua como Patrona
Su imagen estaba en la pared de una capilla antigua de la Catedral de Sevilla, España. En su honor, por ganar la batalla, Martín Fernández de Enciso y Vasco Núñez de Balboa fundaron en 1510 la ciudad de Santa María de la Antigua del Darién, en Panamá, donde construyeron la primera capilla dedicada a la Virgen María en América. Desde allí, su culto se extendió.
El papa Juan Pablo II la proclamó patrona de Panamá el 9 de septiembre del 2000.
Sus fiestas se celebran cada 9 de septiembre.
Paraguay – Nuestra Señora de Caacupé
Se dice que a fines del siglo XVI un indio talló una figura de la virgen en un árbol que lo había protegido del ataque de los indios Mbayaes. Luego, la figura apareció después de la inundación del lago del lago Tapaicuá, en 1603.
El papa Juan Pablo II la declaró patrona el 18 de mayo de 1988.
Los paraguayos la celebran cada 8 de diciembre.
Perú – Nuestra Señora de la Merced
Se trata de una virgen que data del siglo XIII, y que llegó a Perú de la mano de los Padres Mercedarios, una orden fundada en 1235 y que es reconocida por haber liberado a miles de cristianos prisioneros de los moros, que los llevaban como esclavos a África.
El Papa Benedicto XV la coronó el 24 de septiembre de 1921.
Sus fiestas tienen lugar cada 24 de septiembre.
Puerto Rico – Nuestra Señora de la Divina Providencia
La devoción por esta virgen se originó en Italia en el siglo XIII y llegó hasta España. El obispo español Gil Estevez y Tomás fue nombrado monseñor en 1848, y llegó a una iglesia casi en ruinas. Por cinco años luchó para ponerla en pie, y cuando alcanzó su misión, logró traer de Barcelona una figura de la Divina Providencia tallada en madera, que hoy en día está en una capilla de la Catedral Metropolitana de San Juan.
El Papa Pablo VI la declaró patrona de Puerto Rico el 19 de noviembre de 1969.
Sus fiestas se celebran todos los 19 de noviembre.
República Dominicana – Nuestra Señora de la Altagracia
La imagen que la representa se cree que fue pintada en Sevilla a inicios del siglo XVI, y muestra la escena del nacimiento de Jesús. A la imagen se le adjudican múltiples milagros y los estudiosos señalan que en la obra existen 62 símbolos religiosos de gran significado.
El papa Pío XI la coronó en 1922 y Juan Pablo II lo hizo en 1979, visitándola en persona en la Basílica de la Altagracia, en Higüey, República Dominicana.
Los dominicanos católicos la celebran todos los 21 de enero.
Uruguay – Nuestra Señora de los Treinta y Tres
Se trata de una figura de madera que se puso a la intemperie en el departamento de Florida, Uruguay. Frente a ella, 33 patriotas, funcionarios civiles y militares declararon la asamblea soberana el 14 de junio de 1825, y luego, el 25 de agosto del mismo años, cuando se proclamó la independencia del país, los constituyentes pusieron la patria bajo su protección.
El Papa San Juan XXIII la proclamó “Patrona del Uruguay” en 1961.
Los uruguayos católicos celebran sus fiestas todos los segundos domingos de noviembre.
Venezuela – Nuestra Señora de Coromoto
Todo ocurrió alrededor del año 1651, en la ciudad que hoy es Guanare, capital del Estado Portuguesa, Venezuela. La historia cuenta que la virgen se le apareció en varias ocasiones al cacique Coromoto, tratando de convencerlo a convertirse al catolicismo, hasta que lo consiguió, dejándole una imagen religiosa en su mano.
El Papa Pío XII la declaró “Patrona de la República de Venezuela” el 7 de octubre de 1944.
Sus fiestas se celebran todos los 2 de febrero y el 8 y 11 de septiembre.