El jefe de las finanzas de la Conferencia Episcopal Española lamenta que se ponga el foco solo en la Iglesia cuando se habla de abusos sexuales
Fernando Giménez Barriocanal (Madrid, 50 años), casado y con cinco hijos, es el jefe de finanzas de la Conferencia Episcopal Española y el único de la institución que ha accedido a ser entrevistado por EL PAÍS —tras numerosas peticiones— en un momento en el que la Iglesia española se encuentra en el centro de todas las miradas y no solo por la polémica exhumación de los restos del dictador Franco. En su austero despacho, bajo un retrato del papa Francisco y la atenta mirada de su jefe de prensa —que interviene para frenar preguntas sobre los abusos sexuales de algunos miembros del clero—, Barriocanal, también presidente de la cadena COPE, trata de ceñirse a un guion económico y de eludir los temas más espinosos con un “no sé”, “lo desconozco”. El porcentaje de pederastia en la Iglesia española, dice, “es irrelevante”.
Pregunta. ¿Cuánto deberá pagar la Iglesia por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) si el Ejecutivo aplica la exención solo a los templos de culto?
Respuesta. La Iglesia como institución jurídica civil no existe, lo que existen son cerca de 40.000 instituciones, 23.000 parroquias, más de 11.000 instituciones inscritas en el registro de asociaciones, colegios… y cada entidad tiene su autonomía. La Conferencia Episcopal no es competente para tener sus cuentas.
P. Europa Laica lo cifra en 700 millones de euros.
R. Dispondrán de más información de la que tengo yo. Lo desconozco, esa es la realidad.
P. ¿Han hablado con el Gobierno sobre este tema?
R. No. Radicalmente, no.
P. ¿Y están preocupados?
R. ¿Por qué tenemos que estarlo? Si toca sentarse nos sentamos.
P. Para cobrar el IBI por edificios que no son de culto, el Gobierno tendría que modificar la ley de mecenazgo y la de haciendas locales, pero ustedes tienen un privilegio respecto a otras organizaciones por los Acuerdos de 1979 para las casas de curas y obispos. ¿Por qué deben existir esas exenciones?
R. Porque se entiende que lo que aporta a la sociedad es superior a lo que la sociedad deja de recaudar. En el tema cultural, por ejemplo, la Iglesia aporta 22.000 millones de euros a la riqueza nacional —gracias a esas catedrales que no pagan IBI— que suponen unos 4.000 millones de efecto impositivo directo.
P. Pero hablamos de las casas de los curas y los obispos. ¿Son éticas esas exenciones?
R. El cura vive en la parroquia como el farero ha vivido en el faro o la Guardia Civil en la casa cuartel. Ese cura es cura las 24 horas del día y tiene la obligación de atender a la gente las 24 horas al día.
P. Eso ocurre con otras profesiones.
R. No exactamente.
P. Los Ayuntamientos dirán que si ingresaran ese dinero de IBI harían virguerías.
R. Esa discusión la tuve con el alcalde de Valencia y le dije que habría que preguntar a los ciudadanos si prefieren que ese dinero lo tenga Cáritas de Valencia o lo tenga el señor alcalde.
P. ¿No cree que los ciudadanos preferirían más transparencia?
R. ¿Transparencia en qué?
P. No sabe cuánto se está ahorrando la Iglesia por IBI ni, por ejemplo, cuánta indemnización ha pagado la Iglesia por casos de pederastia.
R. La Conferencia Episcopal ha destinado cero euros a eso que está comentando. Ha entregado cero euros a las diócesis españolas para eso.
P. ¿Y las diócesis cuánto han pagado?
R. Lo desconozco.
P. Si la Conferencia Episcopal no sabe, ¿por qué el papa Francisco ha convocado en febrero a todas las conferencias y no a las diócesis a una cita histórica para tratar sobre la pederastia?
R. Porque en el mundo puede haber… ¿cuántas? ¿5.000 diócesis? ¿6.000?
P. ¿Y qué van a decir cuando lleguen allí?
R. Mi tema es la parcela económica, el resto lo desconozco. Las conferencias episcopales nacen para coordinar, pero no son un organismo intermedio entre el Papa y las diócesis.
P. Hay conferencias que han actuado de otra forma. La alemana, por ejemplo, encargó el informe que destapó los abusos. ¿Por qué no lo hace la española?
R. Ese no es el ámbito de mi competencia. Se lo tendrán que preguntar al secretario general [José María Gil Tamayo]. Lo que sí le puedo decir es que en España hay más de 50.000 religiosos, 17.000 sacerdotes, más de 70.000 voluntarios de Cáritas y el 99,9% da su vida por los demás.
P. ¿Y cuál es el problema en reconocer que solo unos pocos han actuado mal?
R. Ninguno. Se reconoce, se pide perdón, se crea una comisión…
P. En España no se ha pedido perdón.
R. Con todo respeto al medio que representan, hay una cosa importante. Cuando uno publica algo [se refiere a los casos de pederastia en el seno de la Iglesia destapados por este periódico], no solo hace falta que lo publicado sea verdad, que probablemente yo no lo cuestionaré salvo que vea que es mentira. Pero la realidad es que se está construyendo un relato sobre este tema que no tiene nada que ver con la realidad de la Iglesia.
P. Pero la Iglesia no ofrece su propio relato.
R. Ustedes pueden coger los datos de Eurostat sobre este tema y ver los porcentajes que hay de las distintas casuísticas y entonces uno dice: ¿y por qué solo se pone el foco en la Iglesia si es un porcentaje insignificante?
P. ¿De qué?
R. De toda esta temática de la que estamos hablando es un porcentaje irrelevante, irrelevante, irrelevante. Irrelevante en el conjunto de la sociedad.
P. Entonces, ¿por qué no se le ponen cifras? ¿Por qué no se encarga ese informe?
R. Todo lo que se esté trabajando lo desconozco…
P. Si se encarga un informe habrá que pagarlo y usted debería estar informado. ¿Se va a encargar un informe como ha hecho la conferencia alemana?
R. Pues no lo sé.
P. Aunque solo hubiera una víctima, ¿No le parece triste decir que es “irrelevante”?
R. Hay que leer lo que dice el diccionario, estoy hablando de que tiene importancia relativa. Ese tipo de cosas a mí me causan… Yo tengo cinco hijos, eh. Y les miro a la cara todos los días. Con eso está dicho todo, pero es que yo sobre ese asunto, que no es un tema económico, no tengo mucho que comentar.
P. Puede llegar a serlo.
R. Bueno, pues cuando lo sea, lo será.
P. ¿Se están preparando?
R. No.
P. La de bienes inmatriculados es otra cifra que también dicen desconocer. ¿Qué es lo que conoce la Conferencia Episcopal?
R. Miren, lo que la Conferencia Episcopal conoce es que hay 23.000 parroquias, miles de ermitas, unos cuantos miles de casas parroquiales, lo que la Conferencia Episcopal conoce es que durante 20 siglos millones de católicos han decidido, porque les ha dado la gana, donar, testar sus bienes a favor de la Iglesia.
P. ¿Cuánto dinero gastan en rehabilitación de monumentos?
R. Sé que son aproximadamente 60 millones de euros. Es muy sencillo, las diócesis y las parroquias mandan un informe con los ingresos que han tenido en el año y a qué los han destinado.
P. ¿Y sabe cuánto han destinado a pagar para ocultar los casos de pederastia?
R. No, porque yo lo que tengo son los cinco capítulos que a mí me interesan… Tenemos las grandes cifras.
P. ¿Nunca se ha interesado por conocer lo que se gasta en indemnizaciones?
R. No, porque tiene que ser una partida relevante.
P. ¿Cómo sabe si es o no relevante si la desconoce?
R. Si el problema de la Iglesia a día de hoy fuera esa partida lo sabría. No sé si después de estas campañas o de la sensibilidad que tiene la gente ahora, pues surge un problema, pero a día de hoy no es problema. ¿Ha habido algún caso en el que se haya llegado a un acuerdo? Ustedes [EL PAÍS] han investigado y dedicado recursos y tiempo a analizar las sentencias y más o menos pueden saber qué ha ocurrido. Fuera de eso, la partida que pueda haber debe ser escasamente significativa en el conjunto de todas las de la Iglesia.
P. Otra partida es la de los centros concertados. ¿Por qué los colegios católicos siguen cobrando a los padres cuotas que dicen voluntarias y no lo son?
R. ¿Conocen algún colegio católico que cobre cuotas?
P. Todos.
R. Yo no conozco ninguno.
P. ¿Entonces qué cobran?
R. Yo estoy en una asociación de padres en la que pagamos una cuota para servicios adicionales. Yo no conozco a ninguna familia a la que le hayan obligado a ir a la concertada, pero sí a un colegio público porque no había plaza en un concertado. El concierto no llega al 60% de lo que cuesta una plaza en un público, son datos del ministerio.
P. ¿Si los conciertos son tan ruinosos por qué siguen concertando, también en bachillerato?
R. Porque los padres lo demandan. La Iglesia tiene una labor, unos fines y tiene que anunciar el evangelio. En su ADN, desde hace siglos, está la educación, no tenemos montado un chiringuito ni un negocio, sino una actividad educativa y evangelizadora. Los ciudadanos pagamos impuestos y tenemos derecho a una educación de acuerdo con nuestras convicciones.
“QUIZÁ ALGUNA INMATRICULACIÓN NO FUE LO MÁS ADECUADO”
En el asunto de las inmatriculaciones, los bienes que los obispos han puesto a su nombre gracias a una ley franquista, Fernando Giménez Barriocanal deja ver cierto desasosiego. “Yo tengo mi criterio sobre las inmatriculaciones, el mío personal, y es posible que haya cosas que no convenga inmatricular”. “Quizá alguna [inmatriculación] tal vez no fue lo más adecuado, pero eso habría que mirarlo en cada caso concreto”, añade.
El proceso ha sido opaco durante décadas , pero ha acabado estallando incluso en la prensa internacional con casos tan sonados como el de la mezquita de Córdoba. Ha ocurrido en toda España, pero no por igual, depende de cada obispado.
Pregunta. Cuando cambió la ley, ¿hubo algún mandato de la Conferencia a las diócesis para que inmatricularan?
Respuesta. Cada uno ha hecho lo que ha estimado oportuno. Hay quien piensa que la mejor manera de defender la propiedad es que el bien esté inmatriculado. Otros han dicho: “Como efectivamente disponemos del bien y estamos teniendo su pacífica posesión, ¿para qué inmatricular?
P. ¿Se animó a las diócesis a inmatricular desde la Conferencia?
R. Se les dijo que esa legislación antes o después se iba a cambiar [se derogó en 2015] y que si inmatriculaban tendrían el bien registrado a su propiedad.
P. O sea, que sí se les avisó.
R. Se les dieron los pros y las contras. Se les informó.
P. Antes de 1998, cuando se autorizó la inmatriculación de templos, ya habían inmatriculado decenas de ellos.
R. En ese caso, esos actos serían ilícitos. Habría que analizarlo.
P. ¿Analizarlo o repararlo?
R. Habría que analizarlo y el registrador o quien sea deberá decidir cómo proceder.
P. Y cuando digan “esto está fuera de la ley”, ¿la Iglesia tiene pensado reparar lo hecho?
R. Si hubo algún templo que se inscribió antes del 1998, en ese caso estará mal registrado. Que lo diga el registrador o en su caso el juez: ‘les voy a anular la inmatriculación’. Pues muy bien. ¿A continuación qué haré yo? Yo voy a iniciar un expediente de dominio diciendo que yo llevo 200 años aquí, que esta capilla se utiliza para rezar, que las llaves de la iglesia las tiene el párroco, que aquí han recibido el bautismo…
P. Están dispuestos a pelearlo al detalle.
R. No se trata de pelear, se trata de que un bien ha sido destinado al culto porque el pueblo decidió que se destinara al culto…
P. Entonces, también pagarán las reparaciones, el agua, la luz, que ahora sufragan muchos Ayuntamientos.
R. ¿La parroquia quién la utiliza? Los parroquianos. ¿Y ellos no pagan impuestos? Pagan impuestos como todos los españoles. Los que van a misa no son unos apestados… La inmensa mayoría de los gastos de mantenimiento de los templos los sufraga la Iglesia, es decir, el pueblo cristiano.
P. ¿Por qué la Iglesia no devuelve de inmediato San Juan de los Panetes, en Zaragoza, que se inmatriculó antes de que la ley lo permitiera y que además estaba ya registrada?
R. Pues desconozco ese asunto, esa es la realidad.
P. Dice que gastan 60 millones en rehabilitación, la mezquita de Córdoba genera entre 13 y 18 al año. El rico patrimonio español les dará dinero.
R. De los 3.168 Bienes de Interés Cultural de la Iglesia, más del 90% son claramente deficitarios.
P. ¿Cuánto reciben de dinero público para rehabilitaciones?
R. Gastamos 60 millones, y normalmente, la Administración pública pone un euro si tú pones dos. Para el resto te tienes que buscar la vida.