Las protestas pacíficas contra el presidente de la República Democrática del Congo (RDC), Joseph Kabila, convocadas para hoy por grupos católicos estuvieron de nuevo marcadas por fuertes incidentes violentos, informaron a Efe fuentes policiales.
Las marchas y concentraciones se reprodujeron en numerosos puntos del país y, al igual que ya había ocurrido en otras protestas contra el presidente, los manifestantes y las fuerzas de seguridad mantuvieron duros enfrentamientos.
El principal impulsor de las manifestaciones es la organización católica Comité de Coordinación Laico (CLC), bajo la consigna «Marchemos para decir no a la dictadura» en rechazo a la continuidad de Kabila en el poder.
La propuesta de CLC fue respaldada por numerosos grupos de la sociedad civil pese a la oposición del Gobierno.
En lugares como Lubumbashi (sureste), Kisangani (centro norte del país) o Kalamu (Kinshasa) se hizo uso de la fuerza y de gases lacrimógenos para dispersar a los participantes, según informó el portal local Radio Okapi.
La capital, Kinsasha, amaneció con una fuerte presencia policial y militar y en la jornada se vivieron momentos de mucha tensión, como en el asedio por parte de las fuerzas de seguridad a iglesias en las que se encontraban los manifestantes.
Según fuentes policiales consultadas por Efe, aún no hay un balance oficial de heridos ni de detenidos pero la situación es de mucha «violencia».
Además, los servicios de conexión a internet y los mensajes telefónicos permanecen bloqueados en la capital.
El pasado 31 de diciembre, al menos ocho personas murieron por disparos de la policía cuando sacerdotes y fieles católicos se manifestaron en el primer aniversario de la firma del Acuerdo de San Silvestre, que exigía la celebración de elecciones antes de que finalizara 2017.
También en enero hubo manifestaciones que terminaron con un saldo de cinco víctimas mortales.
Gobierno y oposición firmaron en diciembre de 2016 el Acuerdo de San Silvestre para celebrar elecciones antes de que finalizara 2017, sin embargo, la Comisión Electoral anunció el pasado octubre que no sería posible convocarlas hasta 2019.
Finalmente, la Comisión Electoral dijo que las elecciones presidenciales de las que saldrá el sustituto de Kabila se celebrarán el 23 de diciembre de 2018.
Los comicios debían haberse celebrado originalmente en diciembre de 2016, pero las autoridades congoleñas los retrasaron alegando deficiencias en el censo, decisión considerada por la oposición como una maniobra de Kabila para postergar su salida de la presidencia.
Kabila, que se mantiene en el cargo desde la muerte de su padre, Laurent Kabila, en 2001, ya se ha presentado a dos elecciones y tiene prohibido por la Constitución optar a un tercer mandato.
