COMENTARIO: Desde el laicismo nos manifestamos igualmente en contra de la presencia de capillas en centros públicos (universidades, hospitales, prisiones,…) como de templos, mezquitas o sinagogas. El multiconfesionalismo está provocando que en vez de respetarse el espacio público como lugar de convivencia y común a toda la ciudadanía, a lugar de segregación en función de las creencias de cada cula. Creencias y convicciones que pueden llegar a ser tantas como individuos, todas igual de respetables y con iguales derechos, lo que llevaría a un absurdo, pero del que ahora se benefician algunas.
El Hospital Universitario contará desde hoy martes con un espacio físico para que los musulmanes puedan desarrollar sus cultos que coincide precisamente con el inicio del Ramadán. Debemos recordar que el centro hospitalario contaba desde su inauguración con una sala común a todas las religiones para que allí se puedan desarrollar las plegarias de manera independiente a cuales fueran las creencias de quienes utilizan la mencionada sala.
Pues bien, a lo largo de este tiempo, el presidente de la UCIDCE, Laarbi Maateis, lleva negociando con los responsables del centro hospitalario la división de ese espacio común, para que una parte fuera apropiada para las costumbres islámicas.
Pues bien, desde hoy lunes ya se cuenta con ese espacio que ha sido alfombrado siguiendo esas costumbres islámicas y durante este mes de Ramadán tanto los trabajadores, como los enfermos que puedan bajar al mismo y los acompañantes dispondrán ya de un lugar.
La división que se ha realizado de la zona permite que las personas pertenecientes a otras confesiones religiosas puedan seguir utilizando el resto de la sala común que existe.
La habilitación de esta sala se ha realizado siguiendo las mismas fórmulas utilizadas en aeropuertos internacionales como los de París y Londres, entre otros.
Igualmente, para los vecinos de Loma Colmenar, especialmente, los ocupantes de las 225 viviendas de Emvicesa, también tenían un problema añadido durante este período del Ramadán.
Al final se ha solucionado con la colocación de una carpa en las inmediaciones que les permitirá la realización allí de sus rezos.
De todas maneras, se ha localizado ya un inmueble que en un tiempo no muy lejano servirá de mezquita para estas personas.