Los datos desmienten a la fe: Los españoles, cada vez más laicos y menos identificados con el hecho religioso. Apenas 10 millones de españoles asisten en algún momento a oficios católicos al año, un millón escaso profesa una religión distinta al catolicismo, y 8,5 millones de españoles no creen en ninguna religión o ningún dios. El grupo más amplio de españoles (14,2 millones) se declara católico pero confiesa no asistir casi nunca a un oficio religioso.
Aunque no sea el objetivo específico del último Barómetro del CIS (Estudio 3159 de noviembre de 2016), lo cierto es que cada mes este organismo nos aporta una muy valiosa información sobre muchos temas, entre otros el religioso.
Periódicamente, se pregunta a las personas encuestadas (españoles de origen o con la nacionalidad adquirida posteriormente, mayores de 18 años) sobre una serie de temas, y en la pregunta 38 se aborda el tema religioso«¿Cómo se define Ud. en materia religiosa: católico/a, creyente de otra religión, no creyente o ateo/a?», a la que continúa con la 38a «¿Con qué frecuencia asiste Ud. a misa u otros oficios religiosos, sin contar las ocasiones relacionadas con ceremonias de tipo social, por ejemplo, bodas, comuniones o funerales?»
Pues bien, a partir de los resultados ofrecidos, y con ambas preguntas refundidas, hemos generado nuestras propias tablas y gráficos que, creemos, informan mucho mejor de la realidad religiosa en España (a la que, aparte de los datos del CIS, habrá que añadir la situación de las personas extranjeras, a las que no se pregunta en estos Barómetros mensuales. Incluso hemos realizado la inferencia que los datos relativos ofrecidos por el CIS suponen sobre la población absoluta a que hacen referencia, y cuyo dato más actualizado lo ofrece el Padrón continuo del INE a fecha 1/1/16.
Aparte de las personas que no contestan al CIS (NSC), la clasificación primaria que éste hace entre personas católicas y el resto, se ha reclasificado atendiendo a su clasificación secundaria según la frecuencia de asistencia a oficios religiosos. De esta manera «Casi nunca» se reconvierte en «No practicantes«, «Varias veces al año» y «Alguna vez al mes» en «Esporádicos«, y las categorías de «Casi todos los domingos y festivos«, «Varias veces a la semana» e incluso quienes «No Contestan» como «Practicantes«. El objetivo de todo ello residía en despejar la maraña de datos ofrecida en dos tablas distintas, resumiéndolas en una sola que mostrase mejor la información.
La tabla siguiente nos ofrece la información recogida
pero, en todo caso, no hay nada como un gráfico para hacerse una composición de lugar adecuada.
Religiosidad entre los españoles |
Los datos totales así ofrecidos, tanto relativos como absolutos, muestran una imagen muy clara de la identificación religiosa entre los españoles que, además, viene a ser una distribución gaussiana absoluta. Cualquiera que conozca un poco de las distribuciones normales en estadística comprenderá enseguida el porqué es mucho mejor esta forma de exponerlo que no la que ofrece el CIS en bruto.
Con ello se comprueba que la gran mayoría de los españoles son creyentes (un 72,7%, de los cuáles la casi totalidad se identifican como católicos), pero también que junto a la amplitud de esa identificación religiosa tiene que, instantáneamente, moderarse por la escasa profundidad de la misma, que hace que practiquen el catolicismo de forma consecuente a como éste se concibe, por tan sólo un 12,9% de la población.
La amalgama de «Otras religiones» (2,9% de la población) agrupa a otras confesiones cristianas (principalmente las que suelen agruparse como «protestantes» y que recogen desde todo tipo de luteranos y calvinistas, hasta los testigos y mormones, pasando por los anglicanos, y a quienes siguen el rito ortodoxo. A destacar el «culto evangélico» con cada vez más adeptos entre las personas de etnia gitana) y en menor medida a musulmanes españoles (muy presentes en Ceuta y Melilla), y a grupos muy minoritarios de judíos, de budistas e, incluso, de hunduístas, shintoístas y baha’is.
Un importante grupo de españoles se declara directamente ateo (9,2%), mientras que un grupo más numeroso opta por una forma más laxa, definiéndose como no creyente (15,9%) religioso (rehuyen de las religiones, aunque tienen diversas posturas sobre Dios.
Queda por conocer la confesión de las personas extranjeras residentes en España. No hay datos directos sobre los mismos, y cualquier aproximación cuantitativa tiene que hacerse, por desgracia, a partir del conocimiento sobre el país de origen de los mismos, y la confesión religiosa allí mayoritaria o casi única. Haciendo pues una extrapolación de la confesión de la población de su país a ellos mismos, obtenemos la siguiente tabla:
Religión país de origen de los extranjeros |
Puesto que apenas hay inmigrantes de Irán (chiítas), de Israel (judíos) o de Japón (shintoístas), y la inmensa mayoría son de procedencia latinoamericana (católicos), del Magreb (musulmanes sunnitas) o de los países de Europa Oriental (cristianos ortodoxos) y de Europa Occidental (católicos y protestantes sobre todo), es lógico que sean éstas las identificaciones religiosas más habituales y comunes.
Gráfico resumen de la religión entre los extranjeros en España |
A partir de ciertas informaciones en estudios sobre los inmigrantes en España podría obtenerse alguna información sobre la profundidad del hecho religioso entre ellos, pero son estudios meramente indicativos. Se puede presuponer que entre la población musulmana y la católica de origen latinoamericano la religión se vive más intensamente que entre la población española, mientras que entre los europeos, tanto ortodoxos, como protestantes o católicos, las pautas pueden ser similares e incluso ligeramente menos profundas que entre los españoles. Pero son meras conjeturas que cabría comprobar mediante estudios adecuados hoy no disponibles.
En todo caso, y como iremos exponiendo a lo largo de un ciclo propio sobre el tema, la identificación religiosa en España, ni es profunda como se puede observar por los datos, ni siquiera tan extensa como las jerarquías de las distintas confesiones quieren hacer creer (los datos desmienten a la fe), por ejemplo la Conferencia Episcopal Española («Más de 10 millones de personas asisten regularmente a Misa») o la Unión de Comunidades Islámicas en España («Casi 2 millones de personas en España son musulmanas»). Ésta última cifra sirve para intereses tan dispares como los de obtener mayor respaldo del Estado (en forma de subvenciones y presencia en centros educativos) como la islamofobia de la ultraderecha política y mediática tan omnipresente en España.
Andrés Romero. Sociólogo, politólogo y Graduado Social
Prof. Asoc. Dpto. Sociología y Antropología Social UV.