En una recepción en la Casa Blanca para celebrar la festividad musulmana del Eid al-Fitr, la ruptura del ayuno, el presidente ha pronunciado estas palabras, haciendo referencia implícita al lema de campaña del candidato republicano, Donald Trump, que aboga por «Volver a hacer grande a Estados Unidos».
«Los musulmanes estadounidenses son tan patriotas, están integrados y son tan estadounidenses como cualquier otro miembro de la familia de Estados Unidos», ha asegurado el presidente Obama. «Independientemente de que tu familia haya estado aquí generación tras generación, o de que acabes de llegar, eres una parte esencial del tejido de nuestro país», ha añadido.
El Gobierno de Obama se ha enfrentado a críticas por su plan para recibir a hasta 10.000 refugiados sirios en Estados Unidos este año, ya que algunos republicanos advierten de que existe la posibilidad de que entre los solicitantes de asilo se infiltren milicianos violentos.
Precisamente el líder de los republicanos propuso prohibir la entrada de aquellos que profesan el Islam en el país, después de que un musulmán y su esposa mataran a 14 personas en San Bernardino, California.
«Aún más, identificar a los musulmanes estadounidenses alimenta las mentiras de organizaciones terroristas como Estado Islámico, de que Occidente de alguna forma está en guerra con una religión que tiene más de mil millones de fieles», ha afirmado el mandatario, antes de subrayar que esa no es una estrategia «inteligente» de seguridad nacional.