Tres asociaciones laicistas francesas (Cercle Maurice Allard, le Poing Commun et la Libre Pensée du Rhône) denuncian que el Ayuntamiento de Lyon pretende otorgar una subvención de un millón de euros para la construcción del Instituto Francés de la Civilización Islámica.
Plantean que ese proyecto se presenta como de interés cultural cuando en realidad esconde un claro carácter religioso: sus inicios están en la mezquita de Lyón, en sus líderes religiosos y forma parte de un proyecto complementario, como así lo manifestaba Kamel Kabtane, iniciador de proyecto y líder musulmán, es un «complemento de las actividades de la mezquita». Se pretende de este modo arropar como cultural un proyecto confesional y de culto.
Por ello las aociaciones:
Alertan a la ciudadanía y se exigen responsabilidades por esta violación del principio de laicidad, en contradicción con el artículo 2 de la ley de 9 de diciembre de 1905 de separación de la iglesia y el Estado: «La República no reconoce, sufraga, ni subvenciona ningún culto…»
Denuncian que una vez más se utilice el pretexto cultural para ocultar el verdadero carácter confesional y de culto de un proyecto, al que el ayuntamiento de Lyon quita toda dimensión religiosa. Una práctica que ya viene realizando este ayuntamiento cuyo alcalde, en nombre del diálogo interreligioso, ha subvencionado a la la comunidad de San Egidio (católica), la Conferencia de Iglesias Europeas (ortodoxa y protestante) o el Museo del Cristianismo rompiendo la neutralidad del Estado y gastando el dinero público no en obras de interés común, sino de determinadas comunidades religiosas, lo que representa un claro peligro para los ideales del laicismo y la República.
Por último llaman a los representantes políticos a impedir estas vulneraciones y que se mantengan fieles a los valores de la República.