La Administración ha informado de la situación al presidente Daniel Ortega ante la insistencia de la secta en mantener la situación que vulnera los derechos reconocidos a la infancia.
Los adultos del campamento religioso en la zona de Mechapa, municipio de El Viejo, departamento de Chinandega, se oponen a que los niños y niñas reciban asistencia médica, por lo tanto han pasado el informe de la situación al presidente Daniel Ortega, quien tendrá que tomar una decisión al respecto en las próximas horas, informó ayer la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo.
“No hemos podido convencer a estas personas de la necesidad de que los niños sean atendidos. Estamos trasladando al presidente toda la información que vamos encontrando para que se llegue a una conclusión, siendo sumamente cuidadosos en el sentido de dejar claro que en nuestro país somos respetuosos de las creencias, de la fe de las personas, hay libertad de culto y de religión”, aseguró Murillo.
La funcionaria dijo que al Gobierno le preocupa la cantidad de niños que están concentrados en ese lugar y que desconocen si ellos están con sus padres o si al menos están con el consentimiento de estos. Estas interrogantes son las que tratan de aclarar funcionarios del Ministerio de la Familia.
“Mientras tanto vamos a seguir tratando de persuadir a estas personas, (para) que permitan el cumplimiento de las leyes en nuestro país. Los niños tienen derecho en Nicaragua, y tienen derecho a recibir salud y a recibir educación y a la protección de una familia y esa legislación se tiene que cumplir”, manifestó Murillo.
Condiciones deplorables
La coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía aseveró que, según Marcia Ramírez, ministra de la Familia, todos los niños caminan descalzos, sin aseo y requieren de todo. Además que ya encontraron a varios de ellos, procedentes de Jinotega, sin el acompañamiento de sus padres.
“Ahí hablamos que estamos en un proceso de vacunación, es imposible saber si estos niños han sido vacunados, por lo cual a nosotros nos preocupa la posibilidad de una epidemia, habían varios niños con varicela, siguen negándose a que los niños vayan a la escuela, es una situación delicada. También hay varias personas con afectaciones odontológicas, con dolores, pero también se niegan a recibir atención odontológica”, agregó Murillo.
El informe de las autoridades sanitarias, trasladado al presidente Ortega, señala que la mayoría de los niños tiene problemas respiratorios, en la piel, signos de desnutrición y con síntomas de infecciones parasitarias.